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La Federación Leonesa de Empresarios situó este miércoles, 6 de marzo, en «un 1,4 o un 1,6 por ciento» el crecimiento económico «moderado» de la provincia durante este año 2024, que será «empujado fundamentalmente por la industria y la agroalimentación» y que dependerá ... de que «no sigan incrementándose los costes de las políticas laborales y fiscales del Gobierno central».
Así lo trasladó el presidente de la patronal leonesa, Juan María Vallejo, quien hizo un balance de la situación económica de la provincia, para el que «León debe pisar el acelerador respecto a la trasformación del modelo productivo» para hacerlo «más digital, sostenible e innovador», así como «aprovechar al máximo los fondos europeos», para lo que reclamó «mayor facilidad de acceso a las ayudas» mediante la eliminación de «burocracias y exigencias de la Unión Europea». En este sentido, también pidió «mayor coordinación entre las empresas y la Comunidad Autónoma» para que los proyectos adjudicatarios «se adecúen a la realidad laboral diseñando cuestiones prioritarias».
Consciente de la problemática de la provincia debido a la «pérdida de probación y el envejecimiento», con 15.000 habitantes menos en los últimos cinco años», el empresario fue tajante al advertir que «sin personas no se pueden desarrollar proyectos empresariales» y reconoció la dificultad para «cubrir numerosas ofertas de empleo» debido a «la pérdida de activos y el desajuste entre la oferta y la demanda y la formación de las personas y las necesidades empresas».
Por ello, consideró necesario «redefinir las tareas de intermediación del Sepe» y «rediseñar los programas formativos en todos los niveles para incorporar las nuevas competencias profesionales marcadas por las nuevas tecnologías» en ras de «adecuarlas a las demandas de las empresas».
El presidente de la Fele también abogó por «aprovechar» la situación geográfica de la provincia y «conseguir infraestructuras para que el territorio sea atractivo para nuevos proyectos, inversores y empresas», así como para que «los que ya están sean competitivos». Esto, según destacó, pasar por «el desarrollo del Corredor Atlántico y su integración como nodo logístico en el noroeste de España», ya que con 2040 en el horizonte y el Corredor en pleno rendimiento, «aportaría 1.600 millones de euros anuales del PIB y 6.500 empleos en la provincia», además de un turismo que supondría «93 millones de euros al año del PIB y 980 empleos directos anuales».
Los principales retos marcados por la Federación Leonesa de Empresarios para este 2024 pasan por «afrontar el problema del absentismo laboral», situado en un siete por ciento durante 2023, lo que supuso que «11.200 trabajadores no acudieran a sus puestos de trabajo y se perdieran más de 18 millones de horas», así como «la duración media de los procesos de incapacidad laboral por contingencias comunes», con una duración media de 80 días en la provincia frente a los 40 nacionales.
«Para afrontar este grave problema se requiere una batería de medidas que pasan por implementar la asistencia sanitaria, implantar planes de gestión y prevención del absentismo o mayor colaboración de los sistemas públicos sanitarios con las mutuas, así como un sistema normativo homogéneo y estable que no genere diferencias entre territorios», expuso Juan María Vallejo.
También aludió a la importancia de «una política presupuestaria sostenible y responsable que sitúe el foco en la eficiencia del gasto público y no en la presión fiscal», mediante la «mejora de mecanismos de gestión colaboración público-privada y la reducción de la burocracia», lo que permitiría «menores costes y mayor libertad».
En cuanto a la subida del Salario Mínimo Interprofesional y la reducción de la jornada laboral propuestos por el Gobierno de España, Vallejo advirtió que estos «impactarán manera negativa» y que León «será una de las provincias más afectadas», ya que «afecta a unos 5.000 trabajadores, el 8,9 por ciento del total», lo que la situará en «una situación de tensión económica» y tendrá «efectos en la contratación, la sostenibilidad de las empresas locales y en el mercado laboral».
Todo esto lo trasladó el presidente de la Fele después de un 2023 «marcado por la incertidumbre por la situación lítica nacional, la guerra de Ucrania y la guerra en Oriente Medio», lo que se reflejó en «el freno de los indicadores». Así, se produjeron «limitaciones en las condiciones de financiación con una fuerte repercusión en las nuevas operaciones de crédito», al tiempo que la facturación descendió un 2,1 por ciento, mientras que las empresas «tuvieron que afrontar mayores».
Para Vallejo, la principal situación del mercado laboral se produjo el pasado año debido a la pérdida de población activa, ya que «mientras la economía española está creciendo y creando empleo, en León ha disminuido en número de parados en el cómputo laboral a costa de la pérdida de población, su envejecimiento y la dificultad de retención de talento joven provincia». De acuerdo con los datos aportado, a cierre de diciembre de 2023, León contaba con 22.300 parados, lo supone 1.800 menos que el ejercicio anterior, mientras que por sectores, lideran los servicios con más de 15.000.
«La economía leonesa depende cada vez más del sector servicios, donde existen mayores riesgos y desafíos, como vulnerabilidad ante ciclos económicos, porque altamente sensible a la fluctuaciones económicas», aseguró el presidente de Fele. Además, en cuanto a la creación de empresas, León «baja la barrera de las 30.000» y contó en 2023 con 27.952, que fueron 2.115 menos que el ejercicio anterior. Respecto a los autónomos, se cerró el año con 34.975 autónomos, 525 menos que en 2022, de los que más de 300 eran comerciantes.
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