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Ander Azpiroz
Domingo, 11 de junio 2023, 14:11
El PP ya descartó desde el minuto uno la propuesta del PSOE de celebrar seis cara a cara entre Alberto Núñez Feijóo y Pedro Sánchez de cara al 23-J. Ayer, el líder de los populares fue un paso más allá hasta ridiculizar al máximo ... la idea de los socialistas, a los que considera una tropa en retirada y sin comandante.
En un mitin en Santiago de Compostela y ante su más fiel parroquia, Feijóo retó a Sánchez a debatir frente a frente no ya con él –ha aceptado celebrar un debate–, sino con Arnaldo Otegi, Carles Puigdemont, Yolanda Díaz o Irene Montero. Y ya después invitó al jefe del Ejecutivo a confrontar consigo mismo; «con el Pedro Sánchez que en 2018» dijo que nunca pactaría con Bildu y que no dormiría bien con Podemos en el Consejo de Ministro o que, ya en la Moncloa, aprobó la ley del 'solo sí es sí' que ha comportado la rebaja de penas a un millar de agresores sexuales. «Sería insuperable», remató. En cualquier caso, el candidato del PP volvió a recoger el guante para verse con Sánchez al margen de los debates que se fijen junto al resto de fuerzas políticas. Los socialistas interpretan, en cambio, que el jefe de la oposión teme enfrentarse a Sánchez. En ello incidió ayer el catalán Salvador Illa, quien le exigió que explique el programa del PP.
Feijóo vive un momento dulce tras la arrolladora victoria del PP el pasado 28-M. Sus barones están exultantes, sobre todo los que llegarán al poder de sus autonomías en las próximas semanas, aunque en Valencia y Extremadura el Ejecutivo pasa por un pacto con Vox. Feijóo evitó desde Galicia referencia alguna a la formación de Santiago Abascal. Más aún, sacó pecho de que el PP gobernaría también en Castilla-La Mancha y el Principado de Asturias de haber logrado apenas mil votos más. Aunque de haberse dado sus cuentas en ambas regiones, los populares penderían igualmente de Vox.
Feijóo interpreta el 28-M como una victoria personal y del tirón electoral mostrado por sus líderes regionales. Todo lo contrario de lo que ocurre en el PSOE, según la opinión del presidente de la formación conservadora, quien recordó que el sábado los socialistas vivieron un comité federal al que no acudieron el castellanomanchego Emiliano García Page o el aragonés Javier Lambán. Incluso que algunos líderes autonómicos como el 'sanchista' Luis Tudanca denunciaron la intervención de Ferraz en sus listas. Esta es una herida interna dentro del PSOE en la que Feijóo se mostró dispuesto a hurgar.
El candidato del PP también acusó a Sánchez de que, «una vez ya ha asumido su derrota en las generales», trata ahora de situar a sus fieles en cargos públicos. En primer lugar dentro de las listas al Congreso. Pero Feijóo fue más allá. Según dijo, el PSOE estaría intentando «colocar» a periodistas de sus gabinetes de comunicación con «contratos indefinidos en la administración general». También lo buscaría, dijo, con altos cargos policiales para que desempeñen sus cargos durante los próximos años.
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