ERC, a diferencia de Junts y CUP, evita condicionar la investidura de Sánchez a un referéndum

Los de Junqueras fijan tres condiciones: acabar con el déficit fiscal que a su juicio padece Cataluña respecto al resto de España, el traspaso de Cercanías a la Generalitat y en materia soberanista reactivar la negociación con el Gobierno en la mesa de diálogo para avanzar en la autodeterminación. Pero sin líneas rojas en lo que tiene que ver con el referéndum para no atarse de pies y manos en caso de que la aritmética permita a las formaciones de izquierdas y a las nacionalistas armar una mayoría alternativa al PP y Vox. Esquerra, con su abstención, facilitó hace cuatro años la investidura de Sánchez. También le apoyó votando a favor en los presupuestos.

ERC no fija condiciones imposibles, como Junts y la CUP que piden ya un referéndum, porque entre sus objetivos de campaña también figura cerrar el paso a un gobierno de derechas. Junts, en cambio, aboga por el bloqueo institucional. Ni PP ni PSOE, afirman los de Puigdemont. Los junteros han cargado con dureza este jueves contra las exigencias fijadas ayer por Aragonès. Para los de Puigdemont, el planteamiento de ERC y su apuesta por la mesa de diálogo es una «pantalla pasada». El balance de la estrategia de ERC en Madrid es «nefasta», según ha afirmado a candidata de Junts por Barcelona, Míriam Nogueras. Esquera, en cambio, saca pecho en sus mítines de lo logrado estos últimos cuatro años en su negociación con Pedro Sánchez: indultos a los presos del 'procés', mesa de diálogo y derogación de la sedición. Nogueras ha insistido en una rueda de prensa organizada por la agencia Efe que el único precio posible para investir al líder socialista es la transferencia de las competencias para poder organizar un referéndum.