Trumpistas sin contar
José M. de Areilza
Viernes, 30 de octubre 2020, 00:13
Secciones
Servicios
Destacamos
José M. de Areilza
Viernes, 30 de octubre 2020, 00:13
El mayor contraste en la campaña electoral es el que produce el nivel de actividad y energía de Donald Trump con la actitud cauta e incluso apagada de Joe Biden. El demócrata prefiere dejar que su rival muestre todas sus debilidades y excesos y convertir ... la votación del próximo martes en un referéndum sobre un presidente muy anómalo. Trump ama el espectáculo, las grandes concentraciones de miles simpatizantes y el contacto directo con ellos. Desprecia la gravedad del virus y niega la evidencia médica sobre cómo se contagia.
En sus tuits de esta semana proyecta una mezcla curiosa de rabia y optimismo. Es en el fondo actor de un solo registro, que solo sabe hacer la campaña de 2016, con un guión populista de soluciones sencillas a problemas complejos. Crea continuamente un enemigo externo al que culpar de todo (China, la elite de Washington, los inmigrantes o las grandes empresas tecnológicas). Pero en 2020 puede que sea una estrategia gastada: Trump ya no es un alguien ajeno al sistema, un «outsider». Joe Biden tiene muchas menos aristas y arrogancia que sus predecesores demócratas y conecta bien con trabajadores blancos y madres residentes en los suburbios, dos grupos de votantes decisivos para Trump hace cuatro años.
En las jornadas finales de campaña, el argumento más repetido de Trump es que Biden y su hijo son unos corruptos que se han enriquecido con negocios ilícitos en Ucrania y China. Acusa a los principales medios de comunicación y a las redes sociales de ocultar esta noticia. Es un argumento circular, sin fisuras: no hay pruebas y esta es la demostración palmaria de la veracidad de lo que dice. Las encuestas mantienen la ventaja de Biden, aunque en algunos Estados decisivos -Florida y Pensilvania- los márgenes favorables son reversibles. La pregunta que se hacen los estrategas demócratas es si puede haber un voto escondido republicano, que no detectan los sondeos. A estas alturas en 2016, el New York Times daba un 85% de posibilidades de victoria a Hillary Clinton. Muchos potenciales votantes de Trump, blancos y sin estudios, no suelen contestar a las encuestas. Si hay un corrimiento de tierras de última hora a favor de Trump será más bien un terremoto.
José M. de Areilza es doctor en Derecho por la Universidad de Harvard, Secretario General de Aspen Institute España, miembro del Colegio de Abogados de Nueva York y profesor de ESADE.
¿Ya eres suscriptor/a? Inicia sesión
Publicidad
Publicidad
Te puede interesar
Los Reyes, en el estand de Cantabria en Fitur
El Diario Montañés
Publicidad
Publicidad
Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.
Reporta un error en esta noticia
Comentar es una ventaja exclusiva para registrados
¿Ya eres registrado?
Inicia sesiónNecesitas ser suscriptor para poder votar.