Joe Biden se mostró optimista en una comparecencia ante sus seguidores una vez cerradas las urnas en el país. reuters

Biden promete unir al país cuando acabe el conteo

A falta de los resultados finales, el ex vicepresidente de Obama ha obtenido ya más votos que ningún otro candidato

MERCEDES GALLEGO

Nueva York

Jueves, 5 de noviembre 2020, 00:46

Todavía no se habían apagado los rescoldos de la batalla cuando Joe Biden se presentó ante los estadounidenses con tanta solemnidad que muchos lo consideraron el primer discurso de su presidencia. No clamó victoria, como hiciera Donald Trump la noche anterior, pero dejó clara ... su convicción de que ganará, «una vez que se hayan contado todos los votos».

Publicidad

A esas horas la junta electoral de Michigan había incorporado al marcador el abundante paquete de votos de Detroit, donde el 78.6% de la población es negra, entregándole así el empuje final para ganar el estado que le pondría en la Casa Blanca. Bien pudo ser el entusiasmo generado por el ex presidente Barack Obama el sábado, en compañía de Stevie Wonder, el que le dio esa victoria crucial con la que ganar la guerra. A Biden solo le faltaría Nevada, un estado que Hillary Clinton se apuntó en 2016 gracias al 30% de hispanos, la mayoría de origen mexicano y centroamericano. Quienes pusieron los niños que el gobierno de Trump encerró en jaulas y separó de sus padres tendrían la oportunidad de darle la patada final, tal como ha hecho Arizona.

Con la victoria en el bolsillo, tocaba ser magnánimo. El escudero de Obama recogió el testigo del primer presidente afroamericano y prometió que «una vez que dejemos todo esto atrás», será el momento de «bajar la temperatura a la dura retórica de la campaña y empezar a vernos y escucharnos los unos a los otros con respeto». Una tarea difícil, porque a esa misma hora las turbas partidarias de ambos candidatos se enfrentaban a la puerta de la Junta Electoral de Detroit (Michigan), Twitter censuraba el mensaje en el Trump se atribuía en falso la victoria de Pensilvania, y medio millar de personas descendían por la Quinta Avenida de Nueva York pidiendo que se contaran todos los votos. Unos 500 abogados intentaban torcer la voluntad de las urnas en su favor.

Como Hillary Clinton en 2016, Biden tiene ya tres millones de votos más que su rival, pero repartidos en los estados clave y en un año de participación récord en el que los más de 70 millones de votos obtenidos superan a cualquier otra campaña de la historia. «Es de gran significado para mí ganar con la mayoría de los estadounidenses», expresó. De haber sido Trump el vencedor, sería la primera vez en la que se elige dos veces a un presidente sin que gane el voto popular.

«No soy un ingenuo, sé que no va a ser fácil unirnos y cicatrizar las heridas, porque sé lo profundas que son estas ideas contrapuestas que tenemos en muchas cosas, pero también sé que para progresar tenemos que dejar de tratar a nuestros oponentes como si fueran enemigos», entonó. «He hecho campaña como un demócrata pero gobernaré como un presidente estadounidense».

Publicidad

Nadie espera resultados absolutos hasta el fin de semana, cuando Pensilvania deje de contar votos por correo, porque Biden quiere que esta no sea solo su victoria, «sino la de la democracia» en la que todos los votos cuenten. «Nadie nos la va a robar», prometió.

Kamala Harris, el día de las votaciones. afp

«Esto no termina hasta que se cuenten todos los votos»

n la misma línea que Joe Biden se pronunció su compañera de fórmula y candidata a la vicepresidencia, la senadora Kamala Harris. «Esta carrera no se termina hasta que se hayan contado todas y cada una de las papeletas», advirtió. De este modo, Harris trató de tranquilizar a los simpatizantes demócratas, en tensión tras los primeros resultados decepcionantes de la noche electoral.

Este contenido es exclusivo para suscriptores

Disfruta de acceso ilimitado y ventajas exclusivas

Publicidad