El alivio de las restricciones permite crear 134.000 empleos en abril

Pese a que en esta época de crisis las cifras parecen buenas, más cuando aún siguen vigentes fuertes restricciones a la movilidad, se trata del menor crecimiento de cotizantes en abril desde el año 2014 y el peor dato de paro desde 2012. Pese a todo, la Seguridad Social consigue recuperar la barrera psicológica de los 19 millones de afiliados tras crear empleo a un ritmo superior al 3,2%. Supone así casi 600.000 empleos más que un año atrás, cuando en el peor momento de la pandemia se destruyeron de un plumazo 950.000 puestos de trabajo en apenas mes y medio, con lo que abril de 2020 pasará a la historia como el mes más negro para el mercado laboral español.

No obstante, cabe destacar que de esos poco más de 19 millones de trabajadores, un total de 638.283 aún continúan afectados por un Expediente de Regulación Temporal de Empleo (ERTE) y otros 456.000 autónomos están acogidos al cese temporal de actividad y, por tanto, con importantes limitaciones en sus negocios. Si a esto se le suman los 3,9 millones de parados que aún hay, supone que cinco millones de trabajadores están en un limbo laboral a consecuencia de la covid-19.

La recuperación está siendo mucho más lenta de lo esperado a consecuencia de la tercera ola y de una vacunación que hasta este mes no ha conseguido acelerar, por lo que las esperanzas están puestas ahora en el verano y en el segundo semestre del año para poder remontar. Pese a que la comparación interanual arroja muy buenos datos, puesto que hay casi 600.000 afiliados más que un año atrás y 2,7 millones menos de trabajadores afectados por un ERTE, esta comparativa está distorsionada por el efecto negativo que provocó el año pasado la pandemia.

Por tanto, la comparación más rigurosa ha de hacerse con febrero de 2020, justo antes de que estallara esta pandemia, lo que es un fiel reflejo del fuerte impacto que ésta sigue teniendo en el mercado laboral. Así, aún faltarían por recuperar 200.000 afiliados, mientras que hay casi 665.000 parados más por culpa de la covid-19. Además, casi 640.000 trabajadores continúan más de un año después afectados por un ERTE mientras que 456.000 autónomos se mantienen con las ayudas estatales.

El levantamiento de muchas restricciones permitió crear empleo en todos los sectores de actividad, liderados por la hostelería, con 40.000 afiliados más, cifra no obstante sensiblemente inferior, menos de la mitad, a la habitual en un mes de abril. De la misma manera, en abril el ritmo de reducción de los trabajadores afectados por un ERTE fue notable y disminuyeron de media en casi 130.000 personas y se retorna al mínimo alcanzado el pasado octubre. Cabe destacar que de esos 638.000 trabajadores en ERTE, casi la mitad pertenecen a la hostelería: 200.000 en bares y restaurantes y 100.000 en alojamiento.

Lo que trae peores noticias son los datos de contratación: se firmaron 1.356.845 nuevos contratos, lo que supone 47.262 menos que en marzo. De ese total, el 87,9% han sido temporales (1.192.765) y el 12,1%, indefinidos (164.080), un nivel algo mayor del habitual, que ronda el 10%.

Todo hace prever que la leve mejoría que se ha registrado en abril continuará en mayo, siempre y cuando no haya nuevos rebrotes y se mantenga el ritmo actual de vacunación. «Tenemos esperanza de que continúe en los próximos meses siempre que vaya acompañado de una evolución positiva de la crisis sanitaria», explicó en rueda de prensa el secretario de Estado de Empleo, Joaquín Pérez Rey. Ahí está la clave para lograr recuperar la normalidad de cara al verano, que es cuando para cuando se fía la recuperación.