Los economistas del IEE prevén que el aumento del salario mínimo provocará un «empleocidio»

Su presidente, José Luis Feito, ha explicado este término argumentando que si se materializan estas propuestas del Gobierno, se recompondría «el arma de destrucción masiva del empleo» que multiplicó por tres la tasa de paro en los años de la crisis, que fue «mucho peor» que la de los países del entorno. Y no solo es la subida del salario mínimo, sino que el IEE también ha lamentado la probable subida de las cotizaciones y la implantación del registro horario en las empresas, unas medidas que supondrían «ir hacia atrás» y trae «aromas de otros tiempos».

En su opinión, si estas medidas se llevan finalmente a cabo aumentará la contratación a tiempo parcial y temporal. «La subida de las cotizaciones sociales es, a fin de cuentas, un aumento de las nóminas y las empresas ante eso siempre reaccionan recortando personal», ha asegurado Feito, que ha destacado que para que haya «crecimiento inclusivo tiene que haber un crecimiento general lo más intenso posible».

El presidente del IEE ha valorado positivamente las reformas de las pensiones de 2011 y 2013 y ha explicado que hay que ir aumentando la edad de jubilación «gradualmente» porque la esperanza de vida está aumentando, pero sobre todo por la caída de la tasa de natalidad. «Los problemas demográficos hay que hacerlos frente con medidas demográficas», ha explicado Feito.

La situación es «insostenible» en poco tiempo, la carga que supondría al déficit público ligar las pensiones al IPC en «seis o siete años» es «imposible». «No hay que dar por sentado que siempre habrá pensiones«, ha argumentado Feito al explicar que «es un error generalizado pensar que las pensiones son manipulables por completo por los gobiernos» porque «hay límites económicos a la voluntad política».

Además, el organismo rebaja dos décimas su previsión de crecimiento económico para 2019 y recalca en su informe de Coyuntura Económica que la debilidad fundamental es el bajo nivel de ahorro en el sector privado y, sobre todo, en el público, porque ello deriva en un alto déficit público y elevada deuda. «Calculamos que el déficit se cerrará este año en torno al 2,7% del PIB, la cifra que también prevé el Gobierno de Sánchez, cinco décimas por encima de lo planteado en el programa de estabilidad del anterior Ejecitivo.

Los economistas del IEE han vuelto a destacar la idea de que con un aumento del IVA se podría mejorar la situación fiscal. En su opinión, los tipos superreducidos de IVA benefician sobre todo a los más ricos porque «son los que consumen más» y han lamentado que en España «solo el 50%» de la recaudación por IVA está sujeta al tipo general.