El coronarias ha conseguido lo que no se había logrado ni tan siquiera con las reformas: contener de forma significativa el gasto en pensiones. Pero lo ha hecho de la peor forma posible, ya que se debe principalmente al elevado número de personas de avanzada ... edad que han fallecido a consecuencia de esta pandemia. Se suman ya más de 50.000 muertes, mayoritariamente ancianos, según los datos oficiales del Gobierno. Y esto tiene su reflejo en la nómina de las pensiones.
Publicidad
2020 cerrará como el año en el que menos ha subido el gasto de la última década: un 2,5%, lo que supone prácticamente la mitad de lo que lo hacía los dos últimos ejercicios, según se extrae de los datos publicados hoy por el Ministerio de Seguridad Social. Se trata de una cifra un poco inferior a la de 2010, que superó la barrera del 5%, aunque posteriormente este alza se fue frenando debido en gran parte a la congelación de las pensiones que aprobó el Gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero en 2011 y a la revalorización mínima a la que abocó a los mayores la reforma de Mariano Rajoy.
Pese a ello, diciembre volvió a marcar un nuevo récord en el presupuesto destinado a las pensiones contributivas: solo en este mes se gastaron 9.985 millones de euros en pagar las nóminas de cerca de 8,9 millones de beneficiarios, de los cuales casi un millón disfruta además de dos prestaciones. Así, la Seguridad Social ha destinado en 2020 más de 138.000 millones para pagar las pensiones, incluyendo aquí las dos extras.
La causa de esta fuerte reducción en el avance del gasto se debe a que a lo largo de este año marcado por el coronarias apenas se ha incrementado el número de pensionistas. Así, aunque es cierto que hay más personas en el sistema que doce meses atrás, apenas suman 8.000 más. Esta cifra está muy alejada de los 105.500 nuevos beneficiarios de una prestación de la Seguridad Social que se registraron en 2019.
Una de las razones es las numerosas bajas que se han registrado en estos meses de pandemia. Históricas. Así, de enero a noviembre, se han contabilizado 478.434, lo que supone un incremento del 14,6% respecto al año pasado. Nunca en la historia se había llegado a esta cifra récord. Supone casi 61.000 más que en el mismo periodo de 2019, una cifra que supera con creces las muertes por coronarias que reconoce el Gobierno, más acorde con la del INE.
Publicidad
La segunda causa de este frenazo en el gasto se debe a la contención en el número de nuevos pensionistas. En lo que va de año se han dado de alta en el sistema 490.928 nuevos beneficiarios, lo que supone una reducción del 6,4% respecto al año pasado, con datos de noviembre. Son casi 33.500 pensionistas menos que en 2019 y 60.000 menos que dos ejercicios atrás. Es la primera vez desde el año 2007 que la cifra de nuevos pensionistas cae por debajo de la barrera del medio millón.
Aquí la pandemia tiene algo que ver, pero en lo que se refiere a la gestión. Es decir, es consecuencia del colapso que se ha producido en estos últimos meses en las oficinas de la Seguridad Social, debido a la avalancha de prestaciones que ha tenido que asumir, con las numerosas bajas por covid, por las nuevas ayudas aprobadas por el Gobierno para hacer frente a esta crisis y por la puesta en marcha del Ingreso Mínimo Vital. Además, durante una parte del confinamiento las oficinas estuvieron cerradas al público e incluso ahora tienen un aforo reducido, por lo que hay muchos nuevos pensionistas que aún no han podido hacer los trámites para darse de alta y están a la espera de realizarlos.
Publicidad
Por eso, en noviembre se ha registrado un número de altas récord, que supera las 58.000. Solo en enero de 2018 se dio una cifra mayor, superior a las 63.000 nuevas altas. Y por esto mismo se espera también una avalancha también en diciembre, aunque Seguridad Social dio marcha atrás y anunció ayer que aprobará una nueva prórroga de la cláusula de salvaguarda, por lo que miles de parados de la Gran Recesión pueden jubilarse con ventajas. El Ministerio había condicionado la aprobación a un acuerdo en el primer paquete de medidas de reforma de las pensiones en el diálogo social, lo que había provocado el enfado de los sindicatos.
Pero esta reducción de las nuevas altas también se debe al impacto de las reformas del sistema, que han ido endureciendo el acceso al retiro, con una edad legal cada año un poco más tardía y teniendo que acreditar más años de cotización para optar a la mejor pensión posible. Y peor será en 2021, ya que el Gobierno pretende endurecer la jubilación anticipada, lo que puede provocar un efecto llamada y que muchos trabajadores adelanten e retiro para no verse perjudicados.
Disfruta de acceso ilimitado y ventajas exclusivas
¿Ya eres suscriptor? Inicia sesión
Te puede interesar
Publicidad
Utilizamos “cookies” propias y de terceros para elaborar información estadística y mostrarle publicidad, contenidos y servicios personalizados a través del análisis de su navegación.
Si continúa navegando acepta su uso. ¿Permites el uso de tus datos privados de navegación en este sitio web?. Más información y cambio de configuración.