El Ibex-35 gana otro 1% y supera los 9.700 puntos

Con este resultado, el selectivo español fue el mejor del día. Junto a él, claramente en positivo únicamente terminó el PSI-20 de Lisboa, que se anotó un 0,50%. Todos los demás terminaron la jornada en negativo, aunque en ningún caso los indicadores sufrieron descensos muy voluminosos. Así, el Ftse Mib de Milán se dejó un 0,36%, mientras que el Ftse 100 británico y el Dax alemán retrocedieron alrededor de un 0,25%. 

El Ibex-35 se apoyó en algunos de los grandes valores y en el sector financiero. Así, Telefónica fue el valor más rentable, con una revalorización del 2,47%, su mayor subida desde el 5 de abril. A continuación se colocaron CaixaBank y Naturgy, que se anotaron un 2,27% y un 2,15%, respectivamente. Después se situó BBVA, que avanzó un 1,93%, mientras que Iberdrola se anotó un 1,72%. Bankia, Bankinter y Merlin Properties se apuntaron también alrededor de un 1,7%. 

En negativo, únicamente siete valores. el peor de todos fue Meliá Hotels, que se dejó un 1,43%. A continuación se colocó Indra, que retrocedió cerca de un 1%. ArcelorMittal perdió un 0,82%. Amadeus, Técnicas Reunidas, Aena y ACS completaron la lista de valores con pérdidas. 

Dia fue el otro valor que no se sumó a los ascensos: cerró en tablas. 

En el Índice General de la Bolsa de Madrid, Adolfo Domínguez fue el mejor, con una subida del 11,48%. Después se colocó Duro Felguera, con un avance de casi un 10%. En rojo, el peor, Audax, al retroceder un 8,23%. 

La relativa precaución que se observaba en la comunidad inversora (excepción hecha del Ibex-35) se debía a las dudas que hay alrededor de China y de su yuan. Si en la sesión de ayer tranquilizó que las autoridades manifestaran su compromiso con la estabilidad de su divisa, hoy parece que su banco central parece cómodo con una moneda más débil. Que continúe la caída del yuan como consecuencia de las dudas que genera la guerra comercial y sus consecuencias en la economía china puede desencadenar fugas de capitales que no se limitarían únicamente al gigante asiático, sino que podrían alcanzar a otros países del área. Por eso, Adarsh Sinha, de Bank of America Merrill Lynch, avisaba en declaraciones a Bloomberg que vigilará la evolución de la balanza de pagos de China para comprobar si se producen salidas de dinero. 

De Wall Street no teníamos referencias porque Wall Street cerraba por la festividad del 4 de julio. Aunque en la sesión anterior vimos descensos, en parte por la decisión de la justicia china de prohibir las ventas de chips de Micron Technologies.

Pero de la guerra comercial, además de los avatares sobre China, teníamos más noticias en Europa: los ejecutivos de los principales fabricantes de automóviles de Alemania se han reunido con el embajador estadounidense en Alemania para plantearle que un enfrentamiento comercial entre la UE y Estados Unidos causará un daño irreparable a la economía global. La Administración Trump ha amenazado con establecer aranceles del 20% sobre las importaciones de coches europeos. 

En el mercado de divisas, el euro perdía posiciones frente al billete verde. La moneda comunitaria cedía un 0,15% al cierre de la sesión europea, hasta el nivel de 1,1639 unidades. 

En el mercado de deuda, leves subidas de las rentabilidades de los bonos en el Viejo Continente. El interés de los títulos alemanes a diez años llegaba al 0,30%; mientras que el de sus comparables españoles rondaba el 1,30% y el de los italianos, el 2,65%. 

En el mercado de materias primas, el barril de Brent, de referencia en Europa, avanzaba un 0,40%, hasta rebasar los 78 dólares. El precio del oro, mientras tanto, avanzaba un 0,28%, hasta los 1.256 dólares la onza.