El Ibex-35 pierde un 0.40% y encabeza las pérdidas en Europa

Pese a la crisis política española y a los primeros impactos que se están observando en la economía española, a la anómala campaña electoral que se avecina, posiblemente con candidatos en la cárcel o huidos en el extranjero, pese a que el resultado de los comicios del próximo 21-D podría ser muy parecido al de 2015 y a que, en su defecto, podría ser muy difícil formar un Gobierno en Cataluña, el comportamiento del Ibex-35 no fue muy diferente al del resto de los indicadores europeos.

Ello, sobre todo en la primera parte de la jornada. En la segunda parte, una vez Wall Street abrió plano y con cierta tendencia al alza, sí hubo índices que reaccionaron reduciendo sus números rojos. Así, el Cac 40 francés se dejó un 0,19%, mientras que el Dax alemán retrocedió un 0,07% y el Ftse Mib de Milán, un 0,05%. El único que de verdad esquivó los números rojos fue el Ftse 100 británico, que se anotó un 0,03%. Pero cerca de las del Ibex-35 se colocaron las pérdidas del PSI-20 de Lisboa, que se dejó un 0,35%.

No sirvió de mucho que en Europa viéramos una mejora del índice de gestores de compras del sector servicios, al subir desde los 54,9 hasta los 55 puntos por sorpresa, y el compuesto, que incluye también al del sector industrial, pasando desde los 55,9 hasta los 56 puntos. Además, el índice de confianza del inversor en la zona euro, el Sentix, pasó desde los 29,7 hasta los 34 puntos en noviembre, cuando el consenso esperaba que se colocara en los 31 puntos.

De todas maneras, en Wall Street el índice que subía con algo más de brío era el Nasdaq, que se veía impulsado por la opa lanzada a Qualcomm por parte de Broadcom.

Contra el Ibex-35 actuaron la mayor parte de los grandes valores, con Santander, que fue el peor del día con un descenso del 1,23%, a la cabeza. Además, BBVA retrocedió un 0,94%, mientras que Inditex cedió un 0,85%. Asimismo, Telefónica perdió un 0,66%, mientras que Repsol se dejó algo más de medio punto porcentual.

Entre los peores, además, Grifols, Indra y el Sabadell, todos ellos con pérdidas de más de un punto porcentual. En verde, apenas una decena de valores, con Amadeus encabezando las ganancias con una revalorización del 2,40%, mientras que Técnicas Reunidas se anotó un 1,41%. Cellnex se colocó en tercer lugar, con una subida del 0,83%. Terminaron también en positivo Meliá, Aena, ACS, Ferrovial, Iberdrola, Mediaset y Siemens Gamesa.

En el Índice General de la Bolsa de Madrid, Fluidra fue el mejor, con una subida del 18,71%, tras anunciar su fusión con la estadounidense Zodiac. A continuación se colocaron Masmóvil y Almirall, con ganancias de más de siete puntos porcentuales, la segunda tras haber presentado sus resultados de los nueve primeros meses del año. Después, otras dos farmas: Faes y Pharma Mar, que ganaron un 5,78% y un 5,70%, respectivamente. El peor del Continuo fue Sniace, con un descenso del 4,50%.

En el mercado de deuda, vimos caídas generalizadas de las rentabilidades de los bonos, aunque quizás en España con algo menos de intensidad que en el resto de Europa. Así, el rendimiento de los títulos españoles a diez años bajó desde el 1,46% hasta el 1,45%, mientras que el de sus comparables alemanes retrocedió desde el 0,35% hasta el 0,33%.

Ello llevó a la prima de riesgo de España a sobrepasar otra vez los 110 puntos básicos. En el mercado de divisas, el euro tendió a la baja. La moneda comunitaria perdía posiciones: retrocedía al cierre de la sesión europea alrededor de un 0,20%, hasta situarse por debajo del nivel de 1,16.

En el mercado de materias primas, fuerte subida de nuevo del crudo. El barril de Brent, de referencia en Europa, avanzaba un 1,7%, hasta superar los 63 dólares. Se trata de su nivel más alto desde el verano de 2015. Ole Hansen, director de estrategia en materias primas de Saxo Bank, comenta que el crudo se veía impulsado este lunes por las purgas políticas del fin de semana en Arabia Saudí, así como por un ataque con misiles contra Riad por parte de los hutíes de Yemen.

El barril de West Texas, de referencia en Estados Unidos, avanzaba cerca de un 0,3%, hasta los 55,79 dólares. El precio del oro subía al cierre un 0,70%, hasta los 1.278 dólares.