Hacía casi un mes que el Ibex-35 no registraba dos sesiones consecutivas en negativo. Pero este miércoles la Bolsa dio un nuevo paso atrás al perder un 1,1% de su valor, un retroceso que se suma al del martes, cuando cedía otro 1, ... 8%. La recogida de beneficios marcaba la jornada en la que el selectivo cerró en los 7.663 puntos, con lo que se aleja un poco más de los cerca de 7.900 que llegó a rozar a principios de esta misma semana.
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La Bolsa se había visto beneficiada desde mediados de mayo por el impulso del desescalonamiento de la actividad económica en todo el país, después de un batacazo que le llevó hasta mínimos de los 6.100 puntos en marzo, en pleno estado de alarma. Pero el traspiés de este miércoles puede ser significativo por los valores que lo provocaron: la caída de los títulos ligados al turismo y la banca hicieron retroceder al Ibex.
En concreto, las acciones que más perdieron fueron la aerolínea IAG, que cedió un 7,1%;la cadena hotelera Meliá (-5%);o el gestor aeroportuario Aena (-2,8%). También retrocedieron la mayor parte de los títulos bancarios a excepción de Bankia. Bankinter perdio un 4,1%, Santander un 2,8%, BBVA un 2,7%, Sabadell un 2,1%y CaixaBank casi un 1%.
Por otra parte, el presidente de la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV), Sebastián Albella, ha reconocido que el organismo sigue prestando especial atención a la evolución de las posiciones cortas en el mercado, aunque espera no tener que volver a prohibirlas «nunca más».
Durante una sesión online organizada por el Consejo General de Economistas, Albella ha explicado que están en contacto con el Ministerio de Economía en relación a las posibles restricciones de la operativa en corto en el marco de su pertenencia a la Autoridad Macroprudencial Consejo de Estabilidad Financiera (Amcesfi), de la que forman parte representantes de ambos organismos, además del Banco de España, y que han mantenido reuniones periódicas de seguimiento de la estabilidad financiera en los últimos meses.
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El presidente de la CNMV considera que los países que prohibieron el incremento de posiciones cortas durante las semanas de mayor volatilidad en los mercados «hicieron bien», al contribuir a que se calmaran los ánimos, pero que también fue acertado no prolongar la prohibición, debido a que se trata de una medida de «extrema excepcionalidad» y la situación «se había normalizado».
Además, ha repasado la actuación del organismo durante la pandemia del coronavirus, cuyas semanas más duras para los mercados financieros fueron las correspondientes a la segunda quincena de marzo. Desde entonces, los mercados están en una situación de vuelta a la normalidad, ha habido un repunte de cotizaciones y la volatilidad ha bajado de forma significativa. «Creo que lo peor ha pasado en general y que, desde el punto de vista de los mercados, la situación se va a consolidar en términos positivos y razonables», ha explicado.
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