Bruselas da dos meses a España para modificar la declaración de bienes en el exterior

No es la primera vez que Bruselas se muestra en contra de las sanciones del modelo 720 -de hecho abrió un expediente por ello en 2015-, pero nunca hasta ahora había establecido un ultimátum tan claro. La declaración de bienes en el extranjero se implantó en 2013 y obliga a todos los contribuyentes con patrimonio superior a 50.000 euros en el exterior a declararlo a Hacienda. Hasta ahí la Comisión Europea no tiene nada que reprochar. España tiene derecho a exigir a los contribuyentes que faciliten a sus autoridades información sobre determinados activos mantenidos en el extranjero, admite Bruselas en el escrito enviado este miércoles. Sin embargo, el problema se encuentra en el castigo por incumplir el procedimiento.

Así, la norma contempla que presentar la declaración o hacerlo con errores u omisiones supone 5.000 euros por dato o grupo de datos errado. Si se presenta, pero fuera de plazo la cantidad se reduce a 100 euros por dato. Asimismo, no presentar la declaración o dejar algún activo fuera puede llegar a una sanción adicional del 150% sobre la cuota tributada más intereses. Y es que otra de las características del régimen sancionador es que la infracción no prescribe.

Todo ello lleva a Bruselas a considerar que las multas son muy superiores a las sanciones aplicadas en situaciones similares pero a nivel nacional, lo que puede disuadir a empresas y particulares de invertir o trasladarse a través de las fronteras del mercado único. Por eso considera que son contrarias al derecho comunitario y pide su modificación.

97.000 millones en el exterior

De momento, fuentes de Hacienda aseguraron que estudiarán el documento remitido por la Comisión Europea antes de dar una respuesta. En cualquier caso, el departamento que dirige Cristóbal Montoro siempre ha considerado la declaración de bienes en el exterior como una de las mejores herramientas para combatir el fraude fiscal. Sólo en 2015 los españoles declararon 97.700 millones en bienes y derechos en el extranjero (la mayor parte en Suiza).

Pero lo más importante es la vasta base de datos que esta declaración genera y que sirve a la Agencia Tributaria para cotejar datos e iniciar investigaciones posteriores. De hecho, desde 2013 se han realizado más de 8.800 actuaciones inspectoras sobre contribuyentes que han rellenado el modelo 720 por la que Hacienda esperan ingresar 1.100 millones.