España recibirá este año 45 millones de turistas, más del doble que en 2020

«España está preparada para abrirse muy pronto al mundo después del peor año de nuestras vidas», aseguró Maroto durante la presentación de una campaña promocional de España, cuyo objetivo es «recuperar a todos los que eligieron España en 2019», sobre todo a los británicos, que son el principal mercado emisor.

«Tendremos una temporada sin duda mejor que la de 2020», prometió, por su parte, el secretario de Estado de Turismo, Fernando Valdés, quien, , durante su intervención en la inauguración de un nuevo EUROForo Vocento bajo el título 'Turismo España', precisó que «el verano sin duda tiene que marcar el inicio de la recuperación de la movilidad internacional».

Las estimaciones que tiene el Gobierno es que a finales de 2021 se logrará recuperar la mitad de las cifras que se alcanzaron en un año récord como fue 2019, antes de que estallara la pandemia, un cálculo que -precisó Valdés- no es optimista sino conservador.

Lograr estas cifras serán posibles gracias a dos certezas: la primera son los avances en la aprobación del reglamento europeo que fijará el uso del certificado verde digital, que está encaminado a propiciar la movilidad europea y que España implantará en junio. De hecho, la semana que viene comenzará un proyecto piloto, avanzó el secretario de Estado.

Y la segunda certeza será la relajación de las restricciones de los viajes no esenciales desde diferentes países. En este sentido, España levantará a partir del 20 de mayo las restricciones de viaje desde el principal país emisor, Reino Unido.

«Hemos pasado meses muy duros, pero hoy podemos decir que las perspectivas de cara al verano nos permiten tener esperanza», remarcó Valdés, que hizo hincapié en que esta confianza se sustenta en el avance en el plan de vacunación, que se está cumpliendo y permite tener al 30% de la población vacunada de los cuales seis millones tienen la pauta completa. «España es hoy, a excepción de Portugal, el país con menor afectación del virus y tenemos que aprovecharlo», apuntó.

El secretario de Estado prometió que gracias a los fondos europeos llegarán al sector turístico hasta 44.000 millones de euros en inversión indirecta. Pero de ese dinero que llegará de Bruselas, solo 3.400 millones se destinarán a inversiones específicas en el turismo, aunque Valdés cifró su impacto en el PIB en 6.732 millones y aseguró que generarán 100.000 puestos de empleo en este sector.

¿A qué se dedicarán esos 3.400 millones? La gran apuesta del Gobierno es el programa de planes de sostenibilidad turística, para lo que se priorizará que los principales destinos no pierdan la sostenibilidad turística así como se fomentará en zonas del interior para frenar la despoblación. También habrá una apuesta por el turismo urbano, que concentra una cuarta parte de la demanda de turismo internacional sobre España, según detalló Valdés.

Además, se destinará una inversión de 760 millones para financiar proyectos de eficiencia energética y economía circular en las empresas turísticas.

Tras las palabras del secretario de Estado, se celebró una mesa en la que se ha debatido sobre cómo recuperar el liderazgo de España en el mercado internacional, donde ha participado el vicepresidente ejecutivo de Exceltur, José Luis Zoreda, quien ha reconocido que España «no puede dejarse llevar ahora por la política de crecer por crecer» en llegadas de turistas internacionales. Ha recordado que «Reino Unido es un mercado determinante» y, ante la exigencia de cuarentena que mantiene ese país para los británicos que viajen a España, Zoreda ha exigido al Gobierno que negocie para acabar con esa exigencia cuanto antes.

Por su parte, Javier Sánchez-Prieto, presidente y CEO de Iberia, ha apuntado que «la conectividad aérea es clave» ya que un 55% de los turistas del mundo se mueven en avión. Además, ha insistido en «impulsar la llegada del AVE a la Terminal 4 de Barajas». «Hay que aprovechar los fondos europeos para reequilibrar la visión del turismo y la de España como destino» internacional.

A continuación, la siguiente mesa de debate, Destinos turísticos inteligentes, trató de cómo la tecnología, una gran aliada en el proceso de transformación del sector, puede convertirse en una herramienta clave para la transformación eficaz y sostenible del sector. Sin embargo, Juan Molas Marcellés, presidente de la Mesa de Turismo, defendió que «hay que seguir manteniendo el turismo de sol y playa», aunque sí recalcó que hay que pensar cómo avanzar en otros productos turísticos a los que les queda mucho recorrido. Además, reclamó un ministerio único para el turismo, para que se convierta en una política de Estado, y advirtió que aunque la colaboración público-privada ha mejorado mucho, «aún queda mucho por hacer».

El tercer y último bloque, Revolución digital para un turismo de calidad, ha estado dedicado a la demanda del turista moderno que requiere de ofertas y experiencias personalizadas a través de las nuevas tecnologías. En este sentido, Héctor Coronel, director del Área de Turismo de Madrid Destino del Ayuntamiento de Madrid, destacó que «tenemos unos destinos únicos en el mundo», pero, sin embargo, «hemos salido un poco con la cabeza gacha, con la sensación de ser un destino no tan potente y tenemos que creernos que somos un destino brillante y podemos convertirnos en el epicentro mundial del turismo». Por su parte, Jimmy Pons, especialista en innovación turística y transformación digital, incidió en que hay que pasar de la calidad a la excelencia» y considera que para ello es determinante la agilidad. «O somos ágiles o estamos muertos», apuntó.