Sánchez presume de su capacidad de atraer inversión tras el acuerdo con Volkswagen

La posibilidad de que el gran grupo alemán, del que forma parte Seat, diera marcha atrás en su intención de construir una gigafactoria en la localidad valenciana de Sagunto por considerar insuficiente la propuesta de financiación pública inquietaba sobremanera en el Ejecutivo y habría supuesto un gran fiasco de consecuencias económicas, laborales y también electorales. Disipadas las dudas, Sánchez reivindicó las «extrarodinarias potencialidades que tiene España» y la «confianza que despierta tanto en los grandes grupos internacionales como en los inversores extranjeros» y aprovechó la ocasión para arremeter contra el PP.

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Arturo Cervellera

El presidente del Gobierno aseguró, por un lado, que luchará porque proyectos de una envergadura equiparable a la de Volkswagen, que invertirá 10.000 millones de euros para la electrificación de las plantas que posee en España y en la construcción de la citada fábrica de celdas de baterías, salgan adelante en lugares como Extremadura (en la que también pensó la multinacional alemana en su momento antes de decantarse por Sagunto) o Andalucía. En concreto, relató que ya está en conversaciones con el grupo Maers para convertir Andalucía en un «referente del hub de transporte marítimo ecológico» y que hace pocos días estuvo con una empresa china que también plantea una colaboración con empresas españoles para crear otra gigafactoria en la comunidad vecina.

«Ahora más que nunca los ciudadanos quieren ver a los políticos resolviendo problemas. Y tenemos un Gobierno que plantea una solución a cada problema y una oposicón sin solución, sin proyecto y después de lo que hemos escuchado en los últimos días sin ninguna educación», dijo cargando contra el líder del PP, Alberto Núñez Feijóo pero también, sin citarlos expresamente, contra la presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, que el lunes llegó a acusar a Sánchez de querer «meter en la cárcel a los partidos de la oposición, como en Nicaragua».