Las autoridades de EE UU investigan a Musk por la compra de Twitter

Los abogados de la conocida red social desvelaron este jueves que el multimillonario es objeto de una indagación formal de la Administración como consecuencia de la actitud de Musk en dicha operación financiera, según apuntó la agencia Bloomberg y recoge Europa Press. «Elon Musk está siendo investigado por las autoridades federales por su conducta en relación con la adquisición de Twitter», según escribieron los abogados en una presentación fechada el 6 de octubre.

Los representantes legales de esta empresa han pedido al tribunal que lleva su demanda contra el magnate por «incumplimiento de contrato» que les conceda acceso a los documentos que Musk ha entregado. «A través del abogado, ha intercambiado correspondencia sustantiva con esas autoridades en relación con sus investigaciones. Twitter quiere esos documentos, porque tienen que ver con cuestiones claves en este litigio», sostienen los letrados de la red social.

El pasado 4 de octubre hubo un nuevo giro en este caso, al conocerse que el multimillonario había decidido finalmente adquirir dicha compañía digital por el precio del acuerdo original alcanzado en abril, pese a haber abierto una intensa batalla con ella a cuenta del número de cuentas falsas que realmente tendría la red. De esta forma, el proceso de compra, valorado en 44.000 millones de dólares (42.156 millones de euros) con un precio de 54,20 euros por acción, seguirá adelante.

Con ese cambio de estrategia, Musk buscaba no tener que enfrentarse al juicio programado para dentro de menos de dos semanas por la demanda de Twitter. En cualquier caso, Musk ha estado demandando desde abril al consejo de la red social la cantidad exacta de 'bots' que hay y la forma que tiene la compañía de auditar estas cuentas. Según la red social, aquellas no superan el 5% del total de usuarios, pero para el multimillonario esta cifra podría elevarse hasta un 20% en la realidad.

Fue por ello que, después de varios avisos, el magnate decidió en mayo suspender de manera temporal la compra. Pocos días después, tras no haber recibido la información que demandaba, el equipo legal de Musk acusó a la red social de un «incumplimiento sustancial» de sus obligaciones en virtud del acuerdo de fusión.

Por ello, Twitter, interesado en seguir con la operación, aceptó finalmente proporcionarle toda la información de cuentas y tuits que había registrados en la plataforma desde que comenzara su andadura hace 16 años. Es decir, un volumen de información altamente difícil de verificar por la gran cantidad de datos incluidos. En concreto, según recoge la demanda, la red social estima que se le proporcionó en torno a 49 terabyte de información. Una decisión que no contentó al magnate y que ahora puede salirle caro al tener que volver al acuerdo inicial si no quiere enfrentarse a la justicia.