Las insolvencias empresariales se dispararán un 30% en 2021

Una cifra que viene condicionada, precisamente, por una de las medidas estrella del Ejecutivo: la moratoria para no entrar en concurso de acreedores que se ha prorrogado hasta finales de 2021. Desde estos bajos niveles, parece lógico que este año el número de quiebras repunte en términos internanualaes. Pero no tanto si esas previsiones implican un crecimiento de las insolvencias del 30%, según Solunion que, además, considera que nos esperan dos o tres años más de incremento en estas cifras.

Aunque la declaración en concurso de acreedores no implica directamente la disolución de la empresa, los expertos recuerdan que, en el caso de España, sí suele ser así, precisamente por lo mucho que tardan las compañías en acogerse a este tipo de procesos.

Es cierto que las medidas adoptadas por el Gobierno han evitado que los concursos de acreedores no alcanzasen en 2020 los 60.000 que anticipaba el Banco de España a principios del pasado año. Pero los expertos indican que, incluidos los 11.000 millones de euros que en las próximas semanas empezarán a llegar a las pymes en forma de ayudas directas y los fondos europeos, habrá un repunte de quiebras en los sectores más afectados pro la pandemia. «Hay una gran mayoría de sectores que no alcanzarán niveles de actividad previos a la crisis hasta la segunda mitad de 2022 o más allá», indican los expertos. Por ejemplo, para el sector turístico, no ven la plena recuperación hasta, al menos, finales de 2023 o incluso más allá.

Y ahí está la clave. A pesar de que para 2022 la recuperación económica ya habrá cogido tracción, según las previsiones del Gobierno y de los organismos internacionales, habrá muchos sectores que aún no hayan recuperado sus niveles de actividad. Los expertos anticipan que, dentro de estos sectores más afectados por la pandemia, saldrán a la luz muchas las empresas que en su momento se acogieron a préstamos avalados por el ICO que empezarán a vencer justo ese año, originando «una fase sensible» para todas esas compañías ya de por sí muy endeudadas.

«Esas compañías tendrán que tener para entonces el músculo suficiente para devolver toda la financiación recibida y sacar adelante su negocio», recuerdan los expertos. «Este tipo de empresas van a empezar a caer, de ahí nuestra previsión de dos o tres años más de crecimiento en las insolvencias», añaden. La previsión de Solunion es que, tras el incremento del 30% este año, esas insolvencias crezcan entre el 10% y el 15% en 2022.

Para este año, y ya por sectores, anticipan que el peor parado será el Servicios, con un incremento esperado para este año del 60% respecto al anterior. Dentro de esta industria, los expertos destacan el segmento de hoteles, restaurantes y catering, que suponen ya más de un 30% de los concursos dentro del sector «con un arranque muy malo en el primer trimestre que confirma nuestra previsión».

Y esto a pesar de contar en sus previsiones con la llegada de los fondos europeos. «Esa es la parte buena, los fondos, las ayudas directas, etc», indican desde Solunion. «Luego hay que ver cómo se gestiona y parece claro que las medidas de apoyo se van a retrasar», advierten.

Sea como fuere, y en un escenario de cada vez mayor endeudamiento, España será el país de la OCDE que lidere el número de insolvencias este año, a pesar de la recuperación de la economía. Dentro de ese crecimiento del 30% esperado para España, la subida será más fuerte en Canarias (para la que se estima un 40% de incremento en las insolvencias empresariales) y Baleares o Cataluña (del 37% cada una), por su elevada dependencia del turismo.

Madrid y Valencia, con subidas esperadas del 31% y del 25%, respectivamente, también se sitúan en la parte alta de la tabla en insolvencias.