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El grupo Inditex ha registrado pérdidas por primera vez en su historia desde que salió a Bolsa en 2001. De febrero a abril (su primer trimestre fiscal) el grupo textil propiedad de Amancio Ortega tuvo que cerrar el 88% de sus tiendas de todo el ... mundo debido a la pandemia de la Covid-19, lo que ha supuesto que sus ventas hayan caído un 44% (de los 5.900 millones de 2019 a los 3.303 millones actuales). Este descenso no ha sido mayor gracias al impulso del canal online, que en pleno confinamiento se ha impulsado un 95%.
Así, hasta abril el grupo que engloba firmas como Zara, Oysho o Stradivarius, registró pérdidas de 409 millones, frente al beneficio de 736 millones del mismo periodo del año pasado. Este resultado incluye una provisión de 308 millones para la ejecución del plan de digitalización y la actualización de tiendas. Según las cuentas presentadas este miércoles a la CNMV, sin esa provisión, las pérdidas serían de 175 millones.
Este plan de la compañía gallega pasa por la inversión de 1.000 millones de euros para el impulso de la actividad online y otros 1.700 para integrar las tiendas tecnológicamente. Todo con el objetivo de que para 2022 las ventas por internet representen un 25% de la facturación total, una cifra lejana del 14% actual a pesar del pico de estos meses. En el primer trimestre las compras por internet se han lanzado un 50%, con mención especial al mes de abril, cuando el incremento fue del 95% respecto a 2019.
El plan de optimización anunciado por Isla se inició en 2012 y concluirá el año que viene, y pasa por cerrar entre 1.000 y 1.200 tiendas, unas 600 este año y otro tanto el que viene, de las que entre 250 y 300 están en España.
La compañía precisó que el valor neto contable de este plan de cierres es de 308 millones, que se ha incluido en la cuenta de resultados del primer trimestre. Aseguran que los establecimientos que cerrarán están al final de su vida útil, cuyas ventas se pueden recuperar en tiendas cercanas y online. Inditex, que cuenta con una red de 7.412 establecimientos a 30 de abril, anunció que en paralelo abrirá unas 150 tiendas más grandes al año.
plan de optimización
Por ello, la compañía destacó que las plantillas -que superan los 176.600 empleados- permanecerán estables y que se ofrecerán nuevos puestos a todos los trabajadores de las tiendas absorbidas, para cubrir las nuevas necesidades de la integración online y los envíos a clientes.
Durante los meses de confinamiento la compañía tuvo que cerrar el 88% de sus tiendas, pero con la desescalada en sus principales mercados la situación ha mejorado: en mayo habían abierto la mitad y a 8 de junio han reabierto el 78% del total, más de 5.700 en 79 países.
Y las ventas van ligadas a ello. En mayo la caída fue del 51%, frente al retroceso del 34% de junio. La compañía espera que todos los puntos de venta estén operativos a finales de este mes. Pablo Isla aseguró que tras la reapertura de todas las tiendas en España desde el pasado lunes, la vuelta ha sido «completamente normal» y los clientes han asumido «sin problema» las medidas de higiene.
En una conferencia con analistas tras la presentación de los resultados, Isla explicó que los consumidores «vienen a las tiendas, miran el producto, se lo prueban y compran. Todo el mundo lleva mascarilla y hay geles, pero en cuestión de consumo la operativa en tienda es completa». Añadió que en mercados donde las tiendas llevan abiertas más semanas, como China, Japón y Corea, los establecimientos ya han alcanzado casi los niveles de ventas del año pasado.
A pesar de presentar los peores resultados de su historia, las circunstancias son «excepcionales» y los accionistas lo saben, aseguró el presidente de la compañía Pablo Isla en una conferencia con analistas. Por ello, la empresa confirmó que propondrá en la junta del 14 de julio el pago de un dividendo de 0,35 euros por acción con cargo al beneficio de 2019, que será desembolsado el 2 de noviembre, lo que supone un 60% menos que los 0,88 euros del año pasado.
Además, suspenden el reparto del dividendo extraordinario este año y lo pospone a 2019, 2021 y 2022. Según Inditex, la política de dividendos de la compañía se mantiene «intacta», con un 'payout' del 60%, así como el complemento de un dividendo extraordinario total de 0,78 euros por acción, cuya distribución estaba prevista para los años 2020 y 2021, y que pasarán a repartirse en 2021 y 2022.
La compañía señaló que su situación de liquidez es «robusta» y, a pesar del mal momento económico por la crisis del coronavirus, el presidente destacó la buena reacción que tuvo el grupo gallego frente a la pandemia, ya que empezaron a actuar «a principios de marzo al ver lo que estaba por venir» y cerraron con un inventario un 10% inferior al del año pasado. «No compramos de manera anticipada al nivel de otros años y eso nos ha permitido no acumular stock», señaló.
En su opinión, esta flexibilidad a la hora de adquirir producto es posible por el modelo de stock integrado entre tiendas online y físicas que tienen implantado plenamente en Zara, Massimo Dutti y Uterqüe y que quieren completar en el resto de cadenas a lo largo de este año.
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