Demanda histórica a Google por abuso de poder en EE UU

La compañía acapara cada día más poder, por lo que el Departamento de Justicia solicita en su escrito «cambios estructurales», lo que abre la puerta a una futura fragmentación de la compañía. «Por el bien de los consumidores, anunciantes y todas las empresas que ahora dependen de la economía de internet, ha llegado el momento de detener la conducta anticompetitiva de Google y restaurar la competencia», señaló el fiscal adjunto del Departamento de Justicia, Jeffrey Rosen, en una rueda de prensa telefónica.

Esta demanda se equipara a la interpuesta contra Microsoft en 1998 y contra AT&T en 1974, que llevó a la ruptura del sistema Bell. Pero el poder de Google no es comparable al que ostentaban esas compañías. Los legisladores de la Cámara de Representantes condenaron hace unos días el «poder de monopolio» de Google, Amazon, Apple y Facebook y pidieron la reforma de las leyes para mejorar la situación. En un informe de 450 páginas explicaban que estas multinacionales se han convertido en monopolios «como no se veían desde la era de los magnates del petróleo y los ferrocarriles». Además, sentenciaron que han abusado de su poder dominante «sobre la distribución y monetización de fuentes confiables de noticias online», lo que da lugar al despliegue de las 'fake news', noticias falsas que se propagan seis veces más rápido por las redes sociales que las verdaderas.

La Justicia estadounidense también explica que Google controla el 80% de las búsquedas de información online en el país y que ha acordado con algunos fabricantes de móviles que su motor de búsqueda esté en los teléfonos de fábrica, dificultando que otros competidores accedan a ese negocio. De hecho, hace dos años la UE ya multó a la empresa con 4.300 millones de euros por prácticas anticompetitivas precisamente por observar cómo Google obligaba a los fabricantes a preinstalar sus 'apps' en los móviles Android.

Esta es una demanda con significado político, ya que inicia una batalla histórica entre el Gobierno estadounidense y un gigante tecnológico nacional. A pocos días de las elecciones presidenciales, este paso hacia delante podría estar relacionado con la promesa de Donald Trump de pedir cuentas a grandes empresas de internet por supuestos vetos a las voces más conservadoras en la red. Además, en este caso tanto conservadores como progresistas están de acuerdo en limitar el poder de la plataforma, los primeros porque los acusan de parcialidad y los segundos preocupados por la ley de competencia.