La francesa Lactalis se plantea el cierre de la fábrica de Lauki de Valladolid

Así lo ha desvelado la vicepresidenta de la Junta de Castilla y León, Rosa Valdeón, en rueda de prensa posterior al Consejo de Gobierno, a preguntas de los periodistas sobre un posible cierre de esta planta, cuya propiedad corresponde a la firma francesa Lactalis.

Valdeón ha observado que «no hay razones objetivas para el cierre», ni razones que afecten a su viabilidad, y ha insistido en que estarán vigilantes para que se cumplan los derechos de los trabajadores, con reubicaciones en otras plantas.

También vigilará la Junta para que se protejan los derechos de los más de cien ganaderos que suministran leche a esta planta.

«Los cierres no se pueden producir de la noche a la mañana», ha advertido la también consejera de Empleo de la Junta, que ha explicado que estarán pendientes de la reunión que mantiene tiene la dirección con el comité de empresa para ver qué razones esgrimen para el cierre.

«Estaremos vigilantes y al lado de los trabajadores». ha zanjado Rosa Valdeón.

Creada en el año 1954 por ganaderos que vendían su leche en Valladolid, Central Lechera Vallisoletana se convirtió en la segunda en constituirse, tras hacerlo en primer lugar la de Badajoz. Respondía la creación a la implantación por parte del Gobierno del régimen de centrales lecheras en España para evitar la venta a granel en las ciudades y garantizar el control higiénico de la leche.

Pero cuatro años después, los ganaderos no podían pagar el coste de la maquinaria y fue cuando Ildefonso Astarloa, un industrial que aportó las máquinas, condonó la deuda a cambio de la participación de los ganaderos y se quedó con la empresa.

En 1961 creó Industrias Lácteas Madrileñas y dirigió desde la capital de España la planta vallisoletana. Fue cuando nació Lauki, voz vasca que significa cuatro, o cuadrado y que hacía referencia a la forma de las botellas en las que entonces se envasaba la leche.

Ya en 1989, el negocio de Lauki entró en la órbita del grupo francés Sodiber que en el año 1993 lo vendió al Grupo Agroalimentario 3A, una alianza de cooperativas francesas de productos lácteos. En la actualidad es propiedad de la multinacional Lactalis, que se hizo con su control en el año 2004.

Desde haace varios años, los sindicatos vienen denunciado el traslado de parte de la producción a otras plantas de Lactalis en Sevilla, Granada y Lugo.