Competencia vigilará los efectos de la compra del Popular

Marín Quemada ha explicado que las "elevadas necesidades de inversión" que requiere un sector como el de la banca, implica a llevar a cabo reducciones de los agentes que participan, porque necesitan ser solventes y fuertes, tal y como les exige el Banco Central Europeo (BCE). Ante esta circunstancia, el presidente de la CNMC ha afirmado que la institución "visualiza" los cambios que se producen en el mercado "para saber si va a haber un incremento de precios y una pérdida de calidad en los productos ofertados". Lo ha hecho para referirse a los efectos que pueden derivarse de la integración de Popular en Santander.

Competencia "seguirá" de cerca los cambios que en el campo de los créditos, los depósitos, las tarjetas o los cajeros, por ejemplo, puedan darse cuando se materialice la operación. Marín Quemada ha afirmado que su "obligación" pasa por analizar si fusiones como las de ambos bancos son "lesivas para los intereses de los ciudadanos". Se trata de un trabajo "continuo" -ha indicado- que vienen realizando desde hace tiempo, pero que se puede intensificar si detectan prácticas llamativas que puedan afectar a los clientes.

Sin embargo, el presidente de la CNMC no ha aclarado si la Comisión pedirá a la Unión Europea el expediente de la integración de Popular en el Santander para analizar los posibles efectos sobre el mercado bancario español. Lo haría, como institución con competencias en el mercado afectado -el español-, siempre que el consejo de la institución exija dicho expediente a Bruselas, aunque las autoridades comunitarias pueden denegárselo. Sin embargo "aún no han comenzado a rodar los plazos", ha afirmado Marín Quemada, para llevar a cabo esa acción.