Calviño, sobre las nevadas: «La primera línea de apoyo está en los seguros»

Asimismo, Calviño se ha felicitado por la «eficiencia» con la que las diferentes administraciones han respondido a las nevadas, así como su coordinación y la «movilización sin precedentes» que ha protagonizado tanto el sector público como el privado: «La respuesta ha sido la adecuada y el Gobierno ha estado en primera línea para poner en marcha todos los operativos».

La ministra también se ha referido en la entrevista a la subida del precio de la luz que ha acompañado al temporal de nieve que afecta a media España. A este respecto, ha explicado que en los últimos dos años y medio se ha puesto en marcha una reforma en profundidad del sector eléctrico que está llevando a que las energías renovables tengan un mayor peso, con el cierre del carbón y el calendario para la clausura de la energía nuclear. Este proceso, ha apuntado, ha supuesto una bajada de los costes de la electricidad del 40%. Pero, acto seguido ha afirmado que, pese a todo, puede haber un aumento «puntual» en el mercado mayorista. Ello, porque las energías renovables, que ahora tienen un mayor peso en el 'mix' y que son las más baratas, no pueden entrar a funcionar en plena borrasca, al tiempo que se tiene que garantizar que se satisface la mayor demanda asociada a la ola de frío.

«No podemos hacer pensar a los ciudadanos que la reforma del sector eléctrico que estamos abordando con determinación supone que no pueden darse subidas puntuales del precio de la luz cuando se da una tormenta perfecta como la que estamos viviendo estos días», ha asegurado Calviño.

Las palabras más duras de Calviño durante su intervención han ido dirigidas a la titular de Empleo, Yolanda Díaz, en relación con el salario mínimo interprofesional. Si Díaz defendió su incremento con el argumento de que únicamente se trata de una subida del 0,9%, que equivale a 30 céntimos al día, la ministra de Asuntos Económicos ha afirmado este lunes que «este tipo de comparaciones o tratar de quitar importancia» a la elevación del SMI «quitan el foco de lo importante»: la readmisión de los trabajadores afectados por ERTE, en que los jóvenes accedan al mercado laboral y en que no aumente el paro femenino. Asimismo, ha argumentado que ahora que el Gobierno está apoyando a las empresas y reduciendo sus costes «hay que ser coherentes».

«Entiendo que los sindicatos pidan subidas salariales, es su función; igual que entiendo que las empresas pidan aumento de las ayudas, pero un Gobierno tiene que tomar medidas con responsabilidad, atendiendo a las circunstancias de cada momento y teniendo claras sus prioridades, que son recuperar el crecimiento económico, proteger el tejido productivo y recuperar la creación de empleo», ha añadido Calviño. Asimismo, ha defendido que el Ejecutivo, en dos años y medio, ha subido el SMI casi un 30%, cifra que no tiene comparación ni con otros momentos ni con otros países. A su juicio, se ha hecho lo correcto con ese incremento, porque supone compensar y recuperar lo perdido. «Pero el impacto de esta medida no es la misma cuando el crecimiento es fuerte, como en los años anteriores, que cuando estamos previendo que en 2020 habrá caído el PIB dos dígitos», ha añadido.

En cuanto a las previsiones económicas, la vicepresidenta ha reconocido que la evolución de la pandemia «está imprimiendo una incertidumbre adicional en las previsiones económicas». Pero también ha añadido que los riesgos han ido evolucionando de forma positiva, como la rapidez en el descubrimiento y despliegue de las vacunas, la reducción de las tensiones geopolíticas o la puesta en marcha de los fondos comunitarios. «Ello refuerza nuestro cuadro macro, aunque aún hay por delante semanas y meses muy complicados», ha asegurado. «Nuestra previsión de crecimiento de entorno a un 7% la seguimos manteniendo», ha concluido. Calviño espera que a partir de febrero parte de la población pueda estar inmunizada y que a lo largo del tercer trimestre pueda empezarse a recuperar la normalidad.