El crédito al consumo repunta al mayor ritmo desde el pasado verano

Con los datos del cierre del primer mes del año, una de las etapas más duras para los bolsillos de los hogares, los consumidores han elevado su deuda un 4,3% con respecto al mismo periodo del año pasado. De hecho, se trata del incremento del saldo acumulado en créditos, préstamos y tarjetas más elevado desde el pasado agosto. Entonces, esta financiación creció a un ritmo del 4,4%, después de un segundo trimestre de 2019 con alzas importantes en el consumo doméstico.

En el último tramo del año pasado, el saldo de financiación al consumo fue moderando sus crecimientos con alzas algo superiores al 3%. Pero 2020 ha vuelto a repuntar con fuerza, aunque en estos registros no se incluyen los posibles efectos de la crisis del coronavirus que está afectando a la economía durante febrero.

No ocurre lo mismo en el caso de las hipotecas, donde los ciudadanos siguen reduciendo su deuda mes tras mes gracias a las amortizaciones que realizan de sus préstamos. El ritmo al que se van practicando estas operaciones de reducción de deuda supera aún al de concesión de nuevas hipotecas. En enero, el saldo de préstamos para vivienda que acumulaban los hogares se encontraba en los 517.189 millones de euros, lo que supone un 1,2% menos que en el mismo mes del año anterior.

La reducción de la deuda hipotecaria, que sigue siendo la que más pesa en los bolsillos, y el incremento de la de los créditos al consumo, cada vez mayor, provoca que la deuda global de las familias se haya reducido un 0,2% en el primer mes del año hasta los cerca de 703.000 millones de euros, según el Banco de España. En el caso de la de las empresas, sus compromisos con la banca también se han recortado un 0,25% respecto a finales de 2019 hasta los 885.585 millones.

En los últimos meses la deuda de los hogares españoles se ha ido estabilizado e incluso ha ido en general bajando hasta situarse en niveles previos a la crisis debido a la reducción paulatina de los préstamos contraídos, a la caída de los tipos de interés y al abaratamiento de los créditos.