Rebeka Masarova sigue los pasos de Muguruza y jugará por España

"He decidido volver a competir por España. Como deportista, una es libre de elegir a qué país quiere representar. Para ello, puede haber diferentes motivos, en mi caso ha sido una decisión que ha venido de corazón", explicó Masarova.

Desde el 1 de enero, es la nacionalidad española la que aparece en su perfil de la Federación Internacional de Tenis, por lo que Masarova ha decidido aclarar si era un error o si en este 2018 se unirá a Garbiñe Muguruza, Carla Suárez y Lara Arruabarrena, entre otras, para defender al equipo español.

"Mi madre es española, mi padre eslovaco y yo he nacido en Suiza. A los 9 años me mudé a España y hasta 2014 competí con ellos. Desde entonces, tuve el honor de representar durante cuatro años a Suiza y poder celebrar mis mayores éxitos hasta ahora", relató.

Recién cumplida la mayoría de edad, Masarova posee un palmarés destacable a nivel júnior con el torneo de Roland Garros en la edición de 2016 a la cabeza, en el que cedió un solo set en todo el torneo.

Además, Masarova en el Abierto de Australia del año pasado, donde compitió como cabeza de serie número uno, alcanzó la final antes de caer en tres sets ante la ucraniana Marta Kostyuk.

A nivel WTA, donde ocupa la posición 433 del mundo, su mejor resultado llegó en el torneo de Gstaad (Suiza) en 2016, cuando fue invitada por la organización para disputar el cuadro final.

Masarova se impuso en primera ronda a la ex número uno del mundo Jelena Jankovic, en segunda a la estonia Anett Kontaveit y a la alemana Annika Beck en cuartos, todas ellas jugadoras contrastadas dentro del circuito.

La nacida en Basilea (Suiza) fue frenada en semifinales por su, por entonces, compatriota Viktorija Golubic, pero el resultado en tierras helvéticas le valió para alcanzar su mejor ránking personal, ascendiendo hasta el 284 del mundo.

Tras varios años entrenando en Barcelona, Masarova es habitual jugadora de los torneos Futures disputados en la ciudad condal, siendo su último campeonato oficial el celebrado en San Cugat el pasado mes de octubre, en el que avanzó a cuartos de final, tras derrotar a Tita Torro-Flor, número 212 del ránking.

La decisión de Masarova se une a las más sonadas en los últimos tiempos en el tenis femenino español como fueron las de Garbiñe Muguruza y Paula Badosa.

Muguruza, se decantó en 2014 por España en lugar de Venezuela y Badosa, de 20 años y nacida en Nueva York, eligió a España por encima de Estados Unidos, llegando a integrar ambas el equipo de Copa Federación español.

La posibilidad de que Masarova entre en los planes a corto plazo de la capitana, Anabel Medina, parece complicada, pero su decisión la vincula de manera más directa a la Federación Española, lo que puede desembocar en invitaciones a torneos como, por ejemplo, el WTA de Mallorca, disputado en hierba, o los Futures que se celebran por todo el territorio español.

"Estoy muy agradecida por todo el apoyo que he recibido durante este tiempo. Estoy muy contenta de poder compartir estas noticias. Con muchas ganas de empezar a competir y darlo todo", finalizó Masarova en su comunicado, emitido en inglés, alemán y español.

La joven Masarova se une al brillante futuro que el tenis femenino español tiene por delante, con Muguruza a la cabeza, y los jóvenes valores de Sara Sorribes, Badosa o Paula Arisa, con la que Masarova ha compartido cuadros en categoría júnior.