Enric Gardiner
Martes, 23 de enero 2024, 10:38
Novak Djokovic ya está en su terreno favorito. En semifinales y finales en Australia, el serbio es imbatible, ha ganado los veinte encuentros que ha disputado en estas rondas y este jueves tendrá la oportunidad de sumar un triunfo más, después de imponerse al estadounidense ... Taylor Fritz (7-6 (3), 4-6, 6-2 y 6-3). Ahí, en sus undécimas semifinales en Australia, le esperará el italiano Jannik Sinner, que sigue sin perder un solo set en todo el torneo y aplastó al ruso Andrey Rublev (6-4, 7-6 (5) y 6-3).
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Por segunda ronda consecutiva, la organización despojó a Djokovic del privilegio de jugar de noche y le colocó de día, cuando más calor hacía, con temperaturas que superaron los 30 grados. Un agobio para el de Belgrado, que contaba, eso sí, con la confianza de tener enfrente a un tenista al que había derrotado en los ocho duelos anteriores y que solo fue capaz de ganarle sets en unos octavos de final que jugaron aquí en 2021, cuando Djokovic jugó lastrado por un problema abdominal. Ni con esas le ganó Fritz por entonces, mucho menos este martes, pese a que se empeñara en convertirse en un superhéroe cada vez que tenía un punto de 'break' en contra.
El estadounidense salvó las quince primeras pelotas de 'break' que enfrentó, ocho en el primer set, que cedió en el 'tie break', y siete en el segundo, que se llevó con una veintena de golpes ganadores. El problema de Fritz, que nunca ha pasado de cuartos en un Grand Slam y su mejor título, el Masters 1.000 de Indian Wells, lo consiguió ante un Nadal con la costilla rota, es que le cuesta horrores dar el paso de carácter necesario para batir a estos tenistas. Cuando el encuentro estaba igualado, Fritz no duró ni dos juegos. Djokovic se lo comió en el inicio del tercero y, pese a que titubeó a la hora de cerrarlo en el cuarto, dio carpetazo a la aventura del americano, que sigue siendo incapaz de dar el paso necesario en esta clase de torneos.
Pese a los enfados con su palco, increpando varias veces a Goran Ivanisevic, y al claro impacto del calor en su cuerpo -se tuvo que dar hielo en los parones-, Djokovic, sin brillar en exceso, pero con su solidez habitual en Melbourne, disputará sus undécimas semifinales en el torneo. No ha perdido nunca en esta ronda -ni en la final- y solo ha perdido cinco sets en total, uno contra Roger Federer en 2016, dos ante Stan Wawrinka en 2015 y dos ante Andy Murray en 2012.
Su rival será el esperado, el que avistó el sorteo hace ya diez días, el italiano Jannik Sinner, que es el único que queda vivo en el torneo que no ha perdido ni un solo set. Sinner arrolló este martes a Andrey Rublev y aumentó a diez el número de cuartos de final consecutivos perdidos por el ruso, más que nadie en la historia.
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Estuvo cerca de ceder la primera manga del torneo el italiano, pero remontó un 1-5 en contra en el 'tie break' del segundo parcial y a partir de ahí no permitió más insubordinaciones del ruso, que cuenta ya con una maldición en esta ronda.
Sinner ha ganado en dos ocasiones a Djokovic, ambas al final de la temporada pasada, en la fase de grupos de la Copa de Maestros y en las semifinales de la Copa Davis, mientras que el serbio le batió en la final de ese torneo de maestros, en Wimbledon 2022 y 2023, y en Montecarlo 2021.
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