Djokovic eclipsa a Federer y acecha su octavo título

Porque el de Belgrado superará a Rafa Nadal en caso de repetir el título que ya logró el año pasado. La derrota del manacorense en cuartos de final ha abierto esa puerta y Djokovic parece decidido a derribarla.

Aunque tuviera durante buena parte del primer set muchas dudas sobre cuál sería el resultado final. Federer entraba a pista entre muchos rumores. Sin haber entrenado el día anterior, malherido tras la batalla en cuartos y con vendajes en la ingle, del suizo se esperaban muchas cosas, desde una retirada previa (la quinta de su carrera) a un triunfo muy fácil del serbio.

Lo más imprevisible fue el inicio del suizo. Salió en tromba. Arrasando y a tierra quemada. A jugarse golpes ganadores y a mostrar un nivel brutal de agresividad. Con mas de 20 tiros ganadores se puso 4-1 y dispuso de tres bolas para el 5-1. Lo tenía hecho, más incluso cuando se fue hasta el 5-2 y 0-30. Pero lo tiró todo por la borda. Federer se hundió y sufrió un naufragio más frente al hombre que le levantó los dos puntos de campeonato en Wimbledon hace apenas unos meses. Se vio abocado a un 'tie break' en el que ya partía como perdedor y es que no le gana un desempate a Djokovic desde 2015 y un partido de Grand Slam desde 2012.

Todo se le vino abajo al suizo, que tras ceder el primer parcial en un excelso 'tie break' de Djokovic, necesitó de atención médica fuera de pista para tratarse ingle y espalda. También pasó por el taller Djokovic, para tomar algo de medicación, pero el serbio ya no dio más signos de debilidad. Aumentó el nivel cuando lo necesitó e inclinó hacia su lado un encuentro que partió de antemano más desnivelado que nunca y que Federer llegó a soñar con ganar. Dos roturas a tiempo permitieron al serbio cerrar el camino del suizo y casi tocar con las manos un título más de Grand Slam.

Lo buscará el domingo ante un novato en Melbourne. Será el austríaco Dominic Thiem o el alemán Alexander Zverev el que trate de evitar el decimoséptimo 'major' de Djokovic, octavo en Australia.

La consecución del título supondría, además, recuperar el número uno del mundo después de cederlo en pasado 4 de noviembre en favor de Nadal.