Zverev ahonda en Ferrer y Alemania cobra ventaja

Pese a que la lentitud del polvo de ladrillo valenciano se adapta mejor a las condiciones del que llegara a ser número 3 del mundo, Zverev jugó a otro ritmo en la pista, apoyado en un revés que funcionó tanto en el paralelo para rematar los puntos, como ejemplo el golpeo con el que cerró la última rotura del partido, como en el cruzado para desplazar a Ferrer de la pista.

Sin un calor extremo en la pista -las temperaturas rondaron los 17º-, Zverev resistió con aplomo los largos intercambios y presionó con fiereza el saque de su rival. Así, a Ferrer le costó levantar el servicio y apenas inquietó en ese aspecto, llegando a conceder 16 pelotas de 'break'. El número uno alemán tomó la iniciativa y se apuntó dos roturas en el set inicial, la primera nada más comenzar, para enfriar los ánimos, y la segunda para tomar la ventaja definitiva y acabar cerrando por 6-4.

La desilusión del primer set apagó el motor al saque de Ferrer -41 % de puntos ganados con primer servicio- y las roturas se sucedieron, siempre a contracorriente del alicantino. La desesperación fue tal que incluso llegó a lanzar la raqueta de pura rabia al ceder su servicio por cuarta vez, para darle una ventaja de 5-2 a Zverev que acabó por ser letal en el set. Ni los nervios propios del finalista del Masters 1.000 de Miami fueron argumento suficiente para la resurrección de Ferrer.

Los errores al saque y las frivolidades como las dejadas a destiempo, que alternaba entre una buena y una mala, eran corregidas por la ineficacia del saque del español, que se continuó desinflando en el tercer set, donde no pudo mantener ningún saque y finalizó con una racha de ocho juegos al saque perdidos de manera consecutiva.

Con la presencia en la grada de numerosas celebridades y estrellas del deporte español, como Gerard Piqué, impulsor de la nueva Copa Davis, Manolo Santana y Juan Carlos Ferrero, entre otros, Zverev infligió a Ferrer una de sus derrotas más dolorosas en esta competición.

Por ser en casa, por ser una de sus últimas oportunidades y por verse superado por un rival 16 años menor que él, la primera derrota de Ferrer en Copa Davis desde 2010 ahondó en el espíritu de la plaza de toros de Valencia, que desde ya confía en la raqueta de Rafael Nadal para devolver la eliminatoria al camino español.