La alternativa Mir

«La victoria pertenecía a Mir», reconocía tras la prueba Pol Espargaró, tercero ese día tras perder la opción de ganar en una lucha de última curva con Jack Miller. Aun así, esos 69 puntos le convierten en el piloto que más ha sumado en este tramo de campaña que para Mir comenzó después de la caída en Brno, un incidente provocado por un error del novato Iker Lecuona: 16 más que el líder Andrea Dovizioso, 25 más que Miller, los dos que le siguen en esta 'clasificación'. Un hecho que está empezando a poner el foco en el piloto español como uno de los más sólidos candidatos a hacerse con este Mundial sin dueño, histórico por contar con seis ganadores diferentes en las siete carreras disputadas (Fabio Quartararo, Brad Binder, Andrea Dovizioso, Miguel Oliveira, Franco Morbidelli y Maverick Viñales), por ser el que cuenta con el líder con menos puntos y por tener justo en su ecuador a los ocho primeros de la general separados por una sola carrera (25 puntos).

«Después de Austria, donde fui muy competitivo, con un podio allí tuve un chute de confianza», reconocía Mir tras ser segundo en Emilio Romaña, forzado otra vez a remontar (desde el puesto once de la parrilla de salida) por no ser capaz de exprimir al máximo su Suzuki en el entrenamiento oficial. «Pensé que si había podido conseguir ese podio sería capaz de repetirlo, y por eso lo estamos consiguiendo. Es difícil mantener la constancia, pero es el objetivo que nos marcamos para todas las carreras», destacaba el mallorquín.

«La Suzuki está muy equilibrada, por eso se ve como una moto más fácil para los pilotos, les permite ser constantes y también conservar los neumáticos para poder ser más rápidos a final de carrera. O por lo menos es lo que parece desde fuera», analizaba Dovizioso, que continúa al frente de la general pese a sus pobres (séptimo y octavo) resultados en Misano. «Y después Mir tiene muchísimo talento. Ya lo dije en el pasado. En este punto es el más peligroso de todos los pilotos que luchan por el título, se veía ya desde hace alguna carrera. En Misano ha emergido todavía más, y habrá que ver cómo irá en Barcelona», apunta el italiano. Una percepción que se ha extendido por el paddock.

«Somos muy constantes y mi impresión es que la Suzuki es una moto que tiene un balance muy bueno y que funciona muy bien en todos los circuitos, sobre todo en los dos últimos que hemos estado», explicaba Mir, que está siendo muy superior al teórico número uno en su box, Álex Rins, uno de los que partía en Jerez como potencial rival de Marc Márquez en la lucha por el título, y que aún no ha conseguido subir al podio.

«Siento que estoy luchando por el campeonato, pero no me fijo mucho en la clasificación porque quedan muchos puntos por repartir. Es cierto que ya hemos cruzado la mitad del Mundial, aunque parece que la temporada empieza ahora, porque los cuatro primeros estamos muy igualados. Ya veremos si somos capaces de mantener esa constancia», apuntaba Rins desde Misano, circuito del que ha salido cuarto de la general, a cuatro puntos de Dovizioso y a tres de los dos pilotos que le anteceden, Quartararo y el ganador este pasado domingo, Viñales.

Sin tiempo para descansar, el campeonato ha puesto rumbo a Barcelona, donde este próximo fin de semana se disputará el Gran Premio de Cataluña. En la pasada temporada, Mir pudo terminar sexto en esa prueba, metido en el grupo del cuarto (con Rins y Miller), en el que en ese momento pasó a ser su mejor resultado del año, una posición en carrera que solo mejoró a final de temporada en Australia. Un buen antecedente para un piloto que reconoce estar en su salsa cuando llega la presión de pelear por un campeonato.