Campeón por la puerta grande

Por una parte con pobres inicios de carrera, algo que esta vez no sucedió, por otra por el naufragio en algunos momentos complicados, precisamente en mojado en Brno, primer mordisco de puntos de Rins, por entonces su máximo rival, o en Phillip Island, con la presión de aprovechar el mal momento del español. Y todo mientras se desvanecían tanto Luthi como Rins. El suizo, ganador en las dos últimas carreras, no fue capaz de unirse a los tres que pelearon por el podio Zarco, Morbidelli y Folger y ni siquiera a los que tenía por delante buscando el cuarto puesto; Rins completó su mal triplete asiático-oceánico con un decimocuarto de más a menos, con un amago de remontada que quedó en nada.

Esto mientras el líder dominaba la prueba y atacaba en cabeza en el momento preciso para sumar su sexta victoria del año, la que ha cerrado su segundo título Mundial consecutivo en la categoría intermedia, el primer piloto que tiene en su palmarés dos entorchados de Moto2.