Vettel va con todo en Baréin

Las 66 milésimas que separaron a Sebastian Vettel de Valtteri Bottas y Daniel Ricciardo auguran una gran igualdad el resto del fin de semana, con una gran incógnita: Lewis Hamilton. El británico no pasó del quinto crono del día, con tandas largas para obtener datos elocuentes no sólo de su monoplaza para esta carrera, sino para las próximas. Una de las teorías que rondan en la cabeza de los responsables de la escudería alemana es que Ferrari les ha ganado la partida en la gestión del combustible. Aunque en este trazado, en teoría, los coches rojos consumen más, temen que este factor pueda ser determinante para el domingo y, por analogía, para el resto del campeonato.

De una de las cosas que más se habló (y se hablará) en el circuito fue de los T-Wing. Este apéndice que se ha estrenado este año cobró protagonismo en los libres, cuando Bottas perdió el suyo y Verstappen se lo encontró en pista. Christian Horner, jefe de Red Bull, ya lidera la corriente de opinión que pide que se prohíban inmediatamente. Casualmente, su escudería es la única que no los ha probado, ni ahora, ni en pretemporada.

Para los españoles fue un día con sensaciones encontradas. Carlos Sainz vio cómo se iban al traste sus planes cuando su Toro Rosso empezó a humear nada más comenzar la segunda sesión. El español, que en la primera no había probado con neumáticos blandos, se quedó sin rodar con superblandos en la segunda. El trabajo para los terceros libres de este sábado se le acumula, en un circuito en el que parece gafado: no ha acabado ninguna de las dos carreras que ha disputado aquí.

Fernando Alonso, por su parte, gozó de un día más tranquilo. Dio 31 vueltas, acabó en una pobre (pero esperada) 14ª posición y volvió al box con el trabajo hecho. Los problemas le tocaron a su compañero. Stoffel Vandoorne perdió prácticamente todo el día por una avería en los primeros libres que les obligó a cambiar la unidad de potencia para el resto del fin de semana, y lo poco que estuvo en pista no dio muestras de un gran rendimiento. Como estaba previsto, a McLaren le tocará sufrir en Baréin.