El mundo del deporte, en vilo por el coronavirus

La vuelta de la segunda semifinal de la Copa de Italia de fútbol, entre el Nápoles y el Inter de Milán, prevista para este jueves, fue aplazada un día después del aplazamiento de la primera, que debían jugar este miércoles la Juventus y el Milan. El gobierno italiano se propone evitar al máximo las aglomeraciones de gente y las multitudes y este miércoles se anunció que todos los partidos de la Serie A se disputarán a puerta cerrada, hasta el 3 abril.

En igual situación está el ciclismo, un deporte en el que Italia debe acoger varias carreras en marzo: Strade Bianche (cerca de Siena el 7 de marzo), la Tirreno-Adriático (del 11 al 17 de marzo) y, sobre todo, la Milán-San Remo del 21 de marzo. El equipo australiano Mitchelton-Scott, que cuenta en sus filas con los británicos Adam y Simon Yates, anunció este miércoles que no tomará parte en las carreras italianas. Tampoco en la París-Niza, y lo justificó por su «deber de proteger la salud y el bienestar» de corredores e integrantes de la formación. Por su parte, el equipo Jumbo renunció a participar en la Strade Bianche.

En otro continente, cuatro equipos ciclistas (UAE Emirates, Gazprom, Cofidis y Groupama-FDJ) fueron puestos oficialmente en cuarentena en Emiratos Árabes Unidos hasta el 14 de marzo. La enfermedad provocó ya la semana pasada la anulación de las dos últimas etapas de la Vuelta a Emiratos.

África no se escapa al caos: la temporada inaugural de la Liga Africana de baloncesto fue aplazada. En Asia, lugar en el que se generó la epidemia, las cancelaciones se multiplican y este miércoles se dio la del torneo de rugby Sevens en Japón y la del torneo preolímpico de baloncesto 3x3 (con la participación de la selección española femenina), que se iba a disputar del 18 al 22 de marzo en Bangalore (India).

Todo ello no hace más que alimentar las especulaciones y rumores sobre qué ocurrirá con grandes eventos deportivos, como la Eurocopa de fútbol (del 12 junio al 12 julio) y los Juegos Olímpicos de Tokio (del 24 julio al 9 agosto).

El Comité Olímpico Internacional (COI) insiste en que una eventual cancelación de los Juegos, que generaría un impacto económico de miles de millones de dólares, no está en el orden del día.

Su presidente, Thomas Bach, afirmó este miércoles que su organización no se ha planteado «ni una anulación ni un aplazamiento» de los Juegos Olímpicos.

«Hacemos frente a desafíos, pero no quiero añadir especulación. El COI reafirma su total compromiso para asegurar el éxito de los Juegos», reiteró Bach tras la reunión de la comisión ejecutiva del COI.

Sin embargo, el primer símbolo de los Juegos, la llama olímpica, podría verse ya de entrada afectado. Su tradicional recorrido, que debe iniciarse a finales de marzo desde Fukushima para ir recorriendo todo Japón, se hará bajo una vigilancia elevada. «El comité de organización va a tomar todas las medidas necesarias y apropiadas para prevenir la propagación de la contaminación entre los corredores, espectadores y los efectivos operacionales», dijeron los organizadores de Juegos Olímpicos de Tokio en un comunicado.

Se pedirá a los corredores y a los espectadores «que se abstengan de participar» si no se sienten cómodos, y el comité organizador deberá «profundamente monitorizar la salud de los corredores y de los efectivos, sobre todo tomándoles la temperatura y con exámenes médicos».

En lo que se refiere a la Eurocopa 2020, que debe disputarse en 12 países, entre ellos Italia, la UEFA se mantiene prudente y su presidente Aleksander Ceferin dijo el martes que no contempla «el peor escenario». «Evidentemente, las competiciones deportivas y con ello el fútbol y la Eurocopa están afectados. No hay que tener temores, pero esto puede evolucionar», afirmó el seleccionador francés, Didier Deschamps, estimando «legítimo tener preocupación».