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Prolegómenos del corro con los luchadores escuchando el himno de León Ainhoa Fierro
Pedro Alvarado evita la épica de Caberín
Lucha leonesa

Pedro Alvarado evita la épica de Caberín

La Montaña suma su décima victoria consecutiva gracias al tercer gallo del Kamikaze de Cistierna

Dani Vergara

Sábado, 9 de noviembre 2024

La lucha leonesa cierra el telón de esta temporada de la misma forma que el año pasado. El Montaña-Ribera se decidió en el último duelo y Pedro Alvarado logró que el gallo no viajara al otro lado de las vías. Abel Cabero venció hasta a cinco montañeses, pero sucumbió ante el de Cistierna cuando estaba a punto de culminar una espectacular remontada.

Un pabellón a rebosar

En el polideportivo de Puebla de Lillo no podía haber más expectación. Las gradas estaban llenas de gente y no es novedad. Pese a ser un deporte individual, el Ribera-Montaña une a muchos pueblos detrás de una camiseta y un sentimiento así no cabía en un solo pabellón.

En este corro no hay tiempo por combate y se resuelve con una sola caída (o cuatro medias). Se enfrentan desde la categoría más baja, prebenjamines ligeros, hasta pesados senior. El ganador se mantiene en el corro y son 46 jugadores por cada bando. El equipo que consigue que el rival se quede sin luchadores se lleva la contienda.

El evento además se solidarizó con los afectados por la DANA. Una urna presidía la entrada al polideportivo para todo aquel que quisiera donar su aportación. Lo recaudado se canalizaría a través de la Cruz Roja Española.

El mazapán también fue para la montaña

Pese a que algún enfrentamiento se alargó de más, el espectáculo estuvo activo desde bien pronto. El infantil Yorel Laiz levantó al público hasta en 13 ocasiones. El de la montaña se llevó el mazapán, premio que se otorga al luchador con más caídas en el corro.

Tras llegar a senior masculino con mucha igualdad, los ligeros comenzaron a cimentar la renta de la montaña. Sergio López de Grandoso batió hasta a tres ligeros y Florián puso en ventaja a los verdes batiendo a varios de medios, una categoría por encima del de Sorriba del Esla.

Víctor Llamazares también encadenó una racha que puso contra las cuerdas a la Ribera. Adrián Rodríguez salió a la colchoneta para frenar al de Valderrueda. Consiguió eliminarle, pero David Riaño tiró al de Villavente y asestó un golpe duro al equipo azul. Una de las mejores bazas de la Ribera había caído.

Parecía un final cantado

Liquete con dos triunfos puso algo de esperanza, pero entonces se cruzó con Moisés Vega. En un corro con mucha tensión y tras dos medias para el montañés, el campeón del gallo en 2019 tumbó al último semipesado ribereño y los verdes ya se veían campeones.

Víctor Javier pudo sostener a los ribereños hasta que Rubén Fierro, el penúltimo semipesado montañés, le mandó a la colchoneta. El de Valdorria estuvo a punto de repetir el gallo de 2021 tras vencer a los otros dos pesados, pero sucumbió ante Caberín, el último ribereño.

El último ribereño hace creer a los azules

Abel Cabero también aguantó ante Rodri la Perla y ya tendría que luchar tan solo ante rivales de su peso. Jorge Rodríguez cayó y ya solo faltaban tres rivales. En un combate que se alargó, David Andrés también acabó doblando la rodilla ante el de Valdearcos que veía la remontada cada vez más cerca.

Era el turno de Unai del Campo, que tenía la oportunidad de ser profeta en su tierra. Pese al cansancio Caberín fue capaz de eliminar al penúltimo montañés y el Ribera-Montaña se iba al combate definitivo. Como el año pasado. Con los mismos protagonistas. Pedro Alvarado frente a Abel Isaí Cabero.

El último duelo

En un combate cargado de tensión, con las dos gradas y contendientes volcados con sus representantes, Alvarado consiguió tumbar a un luchador que se comportó en Lillo como un guerrero y llevó a la Montaña su décima victoria consecutiva, logrando el Kamikaze de Cistierna su tercer gallo tras haberlo logrado el año anterior y en 2018.

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