España debuta con la velocidad y el fondo en esquí

Etxezarreta, que a mediados del mes pasado subió al podio en segunda posición en un descenso de la Copa de Europa, ha dado esta semana la sorpresa en los entrenamientos al quedar segundo y séptimo. Pero estas buenas posiciones quedaron empañadas por sus penalizaciones, que le habrían eliminado de la competición. Con el objetivo de enmendar esos errores, el joven esquiador sueña con darle la primera alegría nevada a España. «El buen nivel de los entrenamientos me da mucha confianza para la prueba. Si todo me sale bien y cuadro la bajada, puedo hacer un muy buen resultado», explicaba este sábado en una rueda de prensa virtual organizada por el Comité Olímpico Español (COE).

Nacido en San Sebastián en 1996, Etxezarreta ha pasado buena parte de su vida en Navarra y comenzó a esquiar porque sus padres lo llevaban a la estación francesa de Luz-Ardiden en Francia. Con solo 14 años, ingresó en el Centro de Alto Rendimiento de Sierra Nevada y, a los 17, ganó su primera carrera y poco después la plata en el supergigante del Campeonato de España. Aunque estuvo dos años retirado por una lesión del tendón rotuliano, se encuentra en su mejor momento y aspira a confirmarlo con su debut en unos Juegos Olímpicos.

Por su parte, el tolosano Imanol Rojo, de 31 años, llega a sus terceras Olimpiadas participando en varias pruebas de esquí de fondo. La primera, de esquiatlón en la sede de Zhangjiakou. «Aunque la nieve está muy fría y muy lenta y hace mucho viento, lo que dificulta esta prueba que ya es dura de por sí, las condiciones se nos adaptan y creo que puede ir muy bien si nos resguardamos en el grupo y no perdemos el rebufo en las bajadas», contaba Rojo en otra comparecencia virtual. Con ambos, el equipo nacional rompe el hielo en Pekín.