Escalada deportiva: tres modalidades, un único objetivo

En Tokio, cada escalador ha competido en las tres disciplinas en un formato 'overall' y la clasificación final se determinó multiplicando los puntos de cada una de las posiciones conseguidas en las pruebas. De ahí la dificultad de conseguir medalla, ya que los escaladores suelen especializarse en una o dos de las modalidades.

Así que los primeros medallistas de la historia han sido los que lograron combinar y equilibrar mejor fuerza, flexibilidad y habilidad. Ganaron quienes tuvieron las puntuaciones más bajas.

Alberto Ginés fue el único representante español que ha logrado plaza en estos Juegos Olímpicos y escaló hasta lo más alto del podio. El escalador cacereño de 18 años había sido oro junior en la Copa de Europa de dificultad y de velocidad este año y bronce en la Copa del Mundo de dificultad en 2019 en categoría absoluta.

En la competición se enfrentaron 20 escaladores en categoría masculina y otras 20 en categoría femenina. Entre los chicos, Ginés tuvo delante a duros y experimentados competidores, como el checo Adam Ondra, el austriaco Jakob Shubert o el japonés Tomoa Narasaki. En cuanto a la prueba femenina, la eslovena Janja Garnbret era la mujer a seguir, junto a las japonesas Miho Nonaka y Akiyo Noguchi o la británica Shauna Coxsey.

Las pruebas de escalada se desarrollaron en el parque deportivo urbano de Aomi, una sede temporal próxima a la villa olímpica y con vistas a la bahía de Tokio.