El deporte leonés afronta la olimpiada más corta con el reto de ganar en representantes

Pero después de estos Juegos Olímpicos de Tokio, que se han retrasado un año por la pandemia de la covid-19, el deporte leonés afronta la olimpiada más corta de la historia, de tan solo tres años, con el reto y la ilusión de ganar en representación de cara a París 2024, la siguiente fecha marcada en rojo en el calendario olímpico.

Pese a que se preveía que estos serían los últimos Juegos Olímpicos de Lydia Valentín, la berciana afirmó tras competir en la categoría de -87 kilos de la halterofilia que quería dejarlo participando en su peso, -74 kilos, por lo que ha abierto la puerta a estar en París. La de Camponaraya, de nuevo, aspirará a liderar a la 'armada leonesa', que cuenta con muchos candidatos a estar en estos Juegos Olímpicos... más los que vayan surgiendo por el camino.

Es la disciplina donde la representación leonesa parece más factible una vez que Lydia Valentín ha confirmado que prolongará su carrera hasta la cita de París. Después de lograr la plata en Pekín 2008, el oro en Londres 2012 y el bronce en Río 2016, la halterófila berciana no quiere dejar la práctica deportiva al más alto nivel sin otro metal.

Valentín apurará su carrera deportiva hasta el 2024 para estar en París, a donde llegará con con 39 años y la ilusión de poner el broche a su trayectoria en su peso y su hábitat natural: el podio.

Después de tener a Mireya González como 'Guerrera' leonesa en Tokio 2020 y a Manolo Cadenas como seleccionador argentino, el balonmano leonés, uno de los más potentes a nivel nacional, aspira a tener una representación mayor en París.

En primer lugar, tanto los equipos masculino como femenino deberán ganarse su plaza olímpica y, a partir de ahí, su multiplicarán las opciones de ver algún leonés en la cita de París. Mireya González sería una clara opción para repetir presencia en unos Juegos Olímpicos si todo va bien, mientras que en el campo masculino algunos nombres como Gonzalo Pérez o Jaime Fernández – que ya han sido internacionales absolutos – podrían tener sus posibilidades olímpicas.

Ha sido una de las modalidades que más olímpicos ha dado a León e, incluso, como en el caso de Manolo Martínez, medallas en citas de esta envergadura. La presencia de Saúl Ordóñez en Tokio mantuvo esa 'racha leonesa' que en Río contó con dos atletas como Sabina Asenjo y Paco Arcilla.

Además del berciano, que buscará repetir como olímpico, ya sea en 800 metros o en 1.500 metros, aparecen otras vías que podrían materializarse. París sería la última oportunidad olímpica para deportistas como Raúl Celada o Blanca Fernández, que lo ha intentado de cara a Tokio, o aquellos que aspiran a hacerlo en la maratón como Nuria Lugueros, Roberto Aláiz o Jorge Blanco.

A ello hay que sumar los jóvenes valores que comienzan a surgir en el atletismo leonés y que, si mantienen una progresión muy alta, podrían tener sus opciones como la lanzadora de peso Mónica Borraz, el saltador de longitud Dani Ámez, el fondista Sergio Alegre o el lanzador de jabalina Pablo Costas, si bien es cierto que tendrán, a buen seguro, más oportunidades en el futuro.

Esta es otra de las modalidades donde el deporte leonés tuvo un ojo a la espera de contar con una representante de la tierra en Tokio. Después de haber entrado en el 'grupo burbuja' de cara al Europeo, Ángela Salvadores no recibió la llamada de Lucas Mondelo ni para esa cita ni para los Juegos Olímpicos.

La escolta leonesa, que sigue rayando a un gran nivel y que ha vuelto al baloncesto nacional con la camiseta del Valencia Basket, llegará a París 2024 en plenitud. Además, la selección nacional vivirá un proceso de renovación, un fin de ciclo plasmado también en la salida del entrenador, Mondelo, tras quedarse sin metal en Tokio.

Y si hay cambio de ciclo en el baloncesto, en el triatlón es más claro aún. La histórica 'triarmada' formada por Mario Mola, Javi Gómez-Noya y Fernando Alarza empieza a acercarse a su retirada, especialmente en el caso de Gómez-Noya, y es el momento de la renovación.

En este punto aparece el nombre de Kevin Tarek Viñuela. El de Vegacervera es uno de los mejor posicionados de la nueva generación de triatletas españoles donde parece que la delantera la lleva Antonio Serrat, pero el leonés contará con sus opciones, siendo además un especialista en una de las nuevas modalidades olímpicas: el relevo mixto.

También en el deporte más mediático – no en los Juegos Olímpicos – habría opciones de tener representación leonesa. Una de las grandes promesas del fútbol nacional, Iván Morante, que ya ha debutado en pretemporada con el Real Madrid, sería uno de los candidatos a estar en la selección sub-23 española en caso de lograr plaza en París 2024.

Internacional en todas las categorías inferiores previas, Morante es uno de los jugadores con más futuro en el panorama nacional y sería, a buen seguro, uno de los nombres a tener en cuenta si España logra plaza en los Juegos Olímpicos.

El legado de Carolina Rodríguez, hasta tres veces olímpica, es enorme en el deporte leonés y hay gimnastas que quieren coger su relevo en la capital leonesa y en el Club Ritmo. Son varios los diamantes que Ruth Fernández y su equipo están puliendo y que podrían comenzar a brillar a nivel internacional a tiempo para París 2024.

El nombre más destacado es el de Paula Serrano, que ya ha sido internacional en Copas del Mundo con España y que, manteniendo su progresión, podría optar a esta cita, a la que llegaría con 20 años.

Y otro nombre que ha crecido enormemente en los últimos años y que sueña con París 2024 en Antonio Barrul. El púgil leonés, que ya cuenta con éxitos nacionales e internacionales, sueña con estar en esta cita olímpica y para ello trabaja desde hace años.

Con una enorme tendencia al alza en los últimos años, Barrul tiene tres años para cumplir su sueño, si bien es cierto que parte en una buena posición dentro del boxeo nacional para poder representar a España en París 2024.