El Sestao frena a la Deportiva

Muchos en El Toralín ya saboreaban la victoria pero el Sestao, que ya había dejado muestras de lo bien que rinden a domicilio, aguó la fiesta. Dos goles en el tramo final de los vascos dejaron a los de Javi Rey sin premio, que vieron como les remontaban el golazo inicial de Yeray (1-2).

Javi Rey iniciaba el año en liga con un once muy reconocible y ante un rival cuya posición en tabla podría invitar a ser subestimado. No fue así, ya que la Deportiva se encontró a un Sestao River valiente, intentando robar el dominio del juego a los bercianos.

Era levemente superior la Deportiva, que jugaba más en campo rival y pisaba más el área que defendía Iago Herrerín. Pero el Sestao, presionando y saliendo rápido cuando recuperaba, obligaba a los blanquiazules a estar atentos en todo momento.

El cuadro ponferradino intentó abrir el campo, con un Carrique muy profundo, un día más, por su costado. En una segunda acción en la que el francés recogió un rechace, la afición local reclamó penalti ante la caída del lateral en la que fue la primera jugada de cierto peligro del encuentro.

El partido parecía estar más de lado berciano, pero el Sestao tenía armas. Y las mostró. Sergi García recortó hacia adentro y chutó desde el pico del área, obligando a Andrés Prieto a tocar el balón como pudo para desviar el disparo y que se estrellara al poste.

La respuesta no se hizo esperar. En la siguiente jugada, Yeray no se lo pensó y en la frontal del área, viendo que Iago Herrerín no estaba bien colocado, soltó un potente zurdazo que se convirtió en el 1-0. Del susto en su propio área, la Deportiva pasó a adelantarse en el marcador.

Con el gol, el dominio blanquiazul fue todavía más notorio. Con más posesión, los de Javi Rey pudieron bajar las revoluciones al encuentro para llevarlas a la intensidad que más les interesaban. El Sestao buscaba algún contragolpe, pero los bercianos evitaban que sucedieran cosas. Y lo estaban logrando.

El partido estaba con unas constantes vitales bajas, sin que sucediera nada reseñable hasta que un error de Markel Etxeberría acercó el 2-0 para los bercianos. Mula se topó, cuando chutaba, con una pierna de un defensa sestaoarra que evitó el segundo tanto ponferradino.

Pero el partido, en líneas generales, no tenía grandes moviientos. La Deportiva no arriesgaba y el Sestao, en la primera mitad, tampoco quería hacerlo. Ambos demostraban que, al mínimo hueco en la defensa rival, atacaban con fiereza ese espacio. Y nadie quería salir dañado en este tramo final del primer acto.

Sin grandes ocasiones ni acercamientos realmente peligrosos, se llegó al final de la primera mitad con la Deportiva por delante y la sensación de estar controlando todos los ámbitos del choque.

Tras el descanso, salió mejor la Deportiva. Los de Javi Rey mostraron predeterminación para buscar el segundo gol, la sentencia, y jugaron sus mejores minutos en los compases iniciales de la segunda mitad. Bustos, con un cabezazo a centro de Mula que se fue rozando el poste, tuvo la mejor ocasión.

Pero el Sestao no se quedó de brazos cruzados. Los vascos adelantaron la presión, mordieron a la Deportiva y lograron generar varios centros al área blanquiazul. En uno de ellos, Miranda tuvo la más clara para los visitantes con un cabezazo que sacó, con una increíble mano, Andrés Prieto, siendo heroico una tarde más en El Toralín.

El partido se abrió y, especialmente en las jugadas a balón parado, llegaron las ocasiones. En un saque de esquina, la tuvo Sibille con un cabezazo que sacó Herrerín cuando se quería colar en la meta sestaoarra.

Las ocasiones se sucedían en una segunda mitad mucho más animada que la primera, a raíz de los espacios que ambas defensas dejaban. Cortés tuvo la más clara con un mano a mano que se fue al lateral de la red.

Pero respondía el Sestao que, con dos cambios ofensivos, mostró su intención de ir a por el empate. Los vascos tuvieron varias opciones de disparos que taponó la defensa berciana, si bien es cierto que ya era una clara declaración de intenciones.

Pero resistía el equipo berciano que, además, amenazaba siempre que podía la portería de Herrerín, con continuas llegadas desde los costados. Apretó todo lo que pudo el Sestao, pero la Deportiva aguantó, sostenida por un Andrés Prieto que dio seguridad a toda la línea defensiva.

Hasta que llegó el premio para los vizcaínos. Diego Aznar ganó la espalda a Sibille para alcanzar un gran centro de Etxeberría y poner el empate, un tanto que dejó frío a El Toralín.

Se lo creyó el Sestao, que fue a por todas. Los vascos, confiados, buscaron la victoria. Y la encontraron con un golazo de Planas que, desde la frontal, puso el balón en la escuadra para cambiar la cara a todo un Toralín que soñaba con mantener viva su buena racha, pero una remontada sobre la bocina les dejó sin ella.

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