La Federación saca la artillería para ayudar al fútbol a paliar la crisis

Entre las iniciativas desgranadas por el presidente de la FEF al término de una reunión telemática con los máximos dirigentes de las federaciones territoriales destaca la propuesta de una línea de crédito preferencial, de un mínimo de 500 millones de euros, para todos los equipos de Primera y Segunda División a través de un crédito sindicado. Rubiales invitó a LaLiga a participar en las negociaciones que se están llevando a cabo con las principales entidades financieras del país, pero Javier Tebas se apresuró a señalar que la idea es inviable porque va en contra de la normativa que regula la venta de derechos audiovisuales.

«Gracias por vuestro ofrecimiento a LaLiga de un crédito de 500 millones de euros con la garantía de los derechos de televisión, pero os ha vuelto a pasar como con las pólizas de seguro en una pandemia. Es imposible. Leed la disposición adicional primera del RD 5/2015 de venta centralizada de TV», escribió Tebas en redes sociales, reproduciendo el citado párrafo del Real Decreto que indica que LaLiga «podrá utilizar todos los derechos cuya comercialización tiene legalmente cedida como garantía para acceder a financiación, con la exclusiva finalidad de facilitar a los clubes y entidades participantes que la integran recursos para saldar sus deudas con las Administraciones Públicas».

Entre las propuestas de la Federación sobresale asimismo el adelanto de cuatro millones de euros para los clubes de fútbol no profesionales a fin de que puedan abonar los sueldos de jugadores y técnicos mientras los torneos permanecen detenidos en una situación de excepcionalidad por la crisis sanitaria. Dicho avance de tesorería tendrá un plazo de devolución de dos temporadas sin intereses y podrán acceder al mismo los clubes de fútbol de Segunda B y Tercera, Primera y Segunda y Segunda B de fútbol sala y Primera y Segunda División Femenina de fútbol sala. De la misma forma, se ofrecerá ayuda puntual a los clubes de fútbol femenino del Programa Élite que acrediten dificultades económicas.

«El fútbol es ahora muy poco importante en comparación a lo realmente importante, el problema que tenemos con una pandemia que supone un problema mundial, pero seguimos trabajando por el fútbol», remarcó Rubiales, que puso de relieve que «todas las subvenciones que tenían que estar pagadas, lo están en fecha» y subrayó que lo mismo ocurrirá con las que tienen que abonarse en abril.

El presidente de la Federación anunció que se darán licencias gratuitas durante los próximos dos años en el fútbol no profesional y explicó que el organismo está dispuesto a admitir el aplazamiento de las eventuales deudas que puedan contraer los clubes con los jugadores durante el periodo de inactividad, garantizando la totalidad de los salarios previa negociación con los sindicatos.

Rubiales incidió en que no se marcan un calendario para la vuelta de las competiciones. «No nos fijamos una fecha tope para reanudar el campeonato. Lo primero es la recuperación del país. Vamos a tener que sumar mucho para reconstruir muchas situaciones. Cuando llegue el momento, será garantizando la salud y con la integridad de la competición», manifestó el presidente de la Federación.

Abundó en la idea de completar los torneos en su integridad, como ya hiciera tras el aplazamiento hace una semana de la Eurocopa al verano de 2021. «Siempre hemos abogado porque una temporada que lleva una cantidad de partidos tremenda debe de acabar. La única manera de terminar esta temporada es llegar al final, por eso no nos ponemos plazo ni queremos volver a toda costa. Primero, terminar esta temporada y luego, si sobran fechas, veremos la siguiente», dijo un dirigente que insistió en que «lo que ganen o pierdan los equipos, que lo hagan en el terreno de juego».

Eso no significa que Rubiales vislumbre un calendario exprés. «Hemos escuchado eso de jugar cada 48 horas de forma continuada y no lo vemos viable, sinceramente. Hemos de dar herramientas para recuperar los partidos perdidos cuando llegue el momento, pero la salud está por encima de todo», proclamó en una comparecencia en la que tendió la mano a LaLiga pero en la que afloraron discrepancias sobre el modo de retomar la actividad una vez den luz verde las autoridades. «Entendemos que no habrá que estrujar a los jugadores, son personas. Aunque estén entrenando en sus casas, recuperar el ritmo de competición y demás... Los que hemos jugado al fútbol sabemos que jugar cada 48 horas es muy difícil», insistió.

Es por eso que la Federación contempla la posibilidad de que la temporada se prolongue más allá del 30 de junio, lo que podría suscitar problemas en el caso de aquellos futbolistas cuyos contratos expiran en esa fecha. «Tanto si se prorrogan los contratos como si no, todos los clubes van a estar en igualdad de condiciones. A día de hoy no tenemos un resultado acerca de si se podrán prorrogar los contratos», admitió Rubiales en una intervención en la que quiso lanzar pese a todo un mensaje de «unión, confianza, esperanza, rigurosidad, prudencia y disciplina».