Remontada épica para recobrar la sonrisa

El Toralín volvió a ser una fiesta. Tras más de un mes y medio sin poder celebrar un triunfo en casa, los aficionados blanquiazules volvieron a saborear una victoria y lo hicieron de la mejor forma posible. El conjunto de Javi Rey se impuso a la SD Amorebieta (5-2) tras una primera mitad para el olvido que nada tuvo que ver con lo visto en el terreno de juego tras la reanudación.

Los primeros compases del choque evidenciaron una igualdad sobre el terreno de juego muy alejada de la distancia que marca la clasificación entre ambos conjuntos. La SD Amorebieta, desde la llegada de Natxo González al banquillo, ha demostrado ser un equipo mucho más serio. Sin embargo, poco iba a tardar la Deportiva en asumir su condición de local y tomar las riendas del esférico para empezar a buscar el daño sobre la zaga visitante.

Con una eficacia sorprendente por los antecedentes de la entidad blanquiazul esta temporada, la Deportiva necesitó tan solo diez minutos para reflejar su superioridad en el marcador. Carrique realizó su habitual arrancada por el carril diestro y lanzó un centro medido a la cabeza de Álex Costa, que mandó el balón al fondo de la red con un buen testarazo.

El goleador blanquiazul, encargado de brindar los tres puntos al conjunto berciano en su visita al Barakaldo, volvió a sacar a relucir su olfato goleador para abrir el luminoso. Este primer tanto, lejos de imprimir confianza a la Deportiva, supuso un paso atrás del cuadro de Javi Rey frente al avance del Amorebieta, cada vez mejor colocado sobre el césped.

Coulibaly e Iñigo Muñoz se cargaron a su espalda al equipo y empezaron a entrelazar las primeras ocasiones de gol. En la banda izquierda, Andoni López no encontraba la fórmula para frenar las embestidas visitantes y, conscientes de ello, los ataques se sucedían una y otra vez por ese costado.

Superada la media hora de encuentro, el dominio zornotzarra se tradujo en el marcador tras una jugada en la que Andrés Prieto logró repeler un mano a mano, pero Alex Carbonell aprovechó el rechace para batir al guardameta por abajo. Con el tanto, llegarían los primeros pitos de una afición consciente de que su equipo no estaba dejando buenas sensaciones sobre el césped.

La herida no fue suficiente con ese primer tanto y, tan solo cuatro minutos después, una combinación entre Yuste y Pablo Hervías acabó con el potente disparo del veterano futbolista para consumar la remontada momentánea. La Deportiva había desaparecido y no volvió a hacer acto de presencia en la primera mitad. De hecho, antes del descanso, los visitantes hilaron varias ocasiones de gol que a punto estuvieron de suponer el tercer tanto del choque.

El pitido final del colegiado supuso un alivio para los jugadores blanquiazules, necesitados de un parón para variar la táctica inicial y salir al terreno de juego con ilusiones renovadas. Esto se vio reflejado con la vuelta de los jugadores al campo, con un triple cambio por parte de Javi Rey que reflejaba a la perfección el enfado del técnico con lo visto sobre el terreno de juego.

Comenzó el segundo tiempo de la misma forma que finalizó el primero, con dudas en el conjunto berciano y convicción en los visitantes. Sin embargo, con el paso de los minutos, los cambios de Javi Rey empezaron a surtir efecto y se empezó a ver una mejor versión sobre el césped.

Álvaro Ramón, uno de los tres futbolistas que entró al partido tras el descanso, justificó la decisión del entrenador mostrando una buena versión de su fútbol. Superada la hora de partido, el lateral puso un gran centro para que Álvaro Bustos empatara nuevamente el choque.

Este gol fue todo lo que necesitaron los bercianos para empezar a creer en la remontada ante su afición. Este ímpetu no tardó en reflejarse sobre el césped y la balanza se decantó por completo hacia el lado local. La posesión era un monopolio blanquiazul y las ocasiones se trenzaban con una efectividad cada vez mayor.

La remontada parecía algo inevitable y fue Yeray el que, con un gran disparo medido desde la frontal del área, puso el tercer tanto que desató la locura en El Toralín. Una vez superada la mayor adversidad, la Deportiva no dio un paso atrás y siguió abalanzado sobre la meta de Gaizca Campos. Álex Costa volvió a ver puerta para sentenciar definitivamente el encuentro y dejar muy herido al Amorebieta.

Los últimos minutos fueron una fiesta en El Toralín, que no veía a su equipo ganar desde el 5 de octubre ante el Celta Fortuna y ansiaban con poder celebrar un triunfo. A este festival se unió también Álvaro Ramón para culminar, con un gol, su excelsa participación en el partido desde que entrara en el descanso.

Este quinto tanto supuso el punto y final a un partido que tuvo de todo y donde la Deportiva fue claramente de menos a más para acabar consiguiendo un valioso triunfo que sumerge a los bercianos en una racha de dos partidos consecutivos ganados para engancharse a la pelea por un puesto en la zona noble de la categoría.