La Roja se conjura para volar alto en Qatar

Los dieciocho futbolistas pertenecientes a equipos de la Liga, los cinco de la Premier, los dos de la Ligue 1 y el de la Bundesliga que encarnan los anhelos de grandeza de la parroquia española fueron desfilando a lo largo de la mañana con rostros sonrientes y maletas atiborradas de confianza antes de entrar en las instalaciones y ser recibidos por Luis Enrique, arquitecto y figura indiscutible de un equipo de autor que quiere volar alto. Los sentidos abrazos que se prodigaron sirvieron para demostrar que el grupo es una piña. Un elemento que suele resultar clave a la hora de perseguir el éxito.

Después de alcanzar el pasado año las semifinales de la Eurocopa multisede, proclamarse subcampeona en la segunda edición de la Liga de Naciones y clasificarse de nuevo este año para la Final Four del vibrante torneo de la UEFA que ha suplantado a los intrascendentes amistosos de otro tiempo, la selección española no se fija ningún tipo de límites en un Mundial en el que España aspira a resarcirse de los sinsabores cosechados en Brasil '14 y Rusia '18. «Mi listón es el infinito», aseveró la semana pasada el preparador asturiano.

Conjurados para cumplir con ese ambicioso objetivo están ya los 26 internacionales. Solo seis de ellos tienen experiencia previa en una Copa del Mundo, por lo que para los 20 restantes Qatar supondrá su puesta de largo en la competición de selecciones por antonomasia. Pero la extraordinaria motivación y la formidable unión del vestuario compensan con creces esa bisoñez de una tropa que camina al unísono con Luis Enrique.

«Además de ser joven, la selección tiene muchas ganas de hacerlo bien, de ganar, y eso se ve reflejado en el campo», señaló Pedri, quien durante un acto publicitario como imagen de 'Plátanos de Canarias' se mostró dispuesto a raparse la cabeza si la selección española regresa de Qatar con la segunda estrella cosida en la camiseta. «Yo soy de aquellos que soñaban con jugar un Mundial y estar en uno es hacer realidad un sueño», incidía Rodrigo Hernández, otro de los escogidos para la sala de máquinas.

La selección española se ha entrenado este lunes por la tarde con tres ausentes: Azpilicueta, Marcos Llorente y Morata, que trabajaron en el gimnasio. El martes, a las 11:00 horas, volverán a entrenarse en la Ciudad del Fútbol de Las Rozas antes de poner rumbo a Amán. Allí se ejercitarán el miércoles en el Estadio Internacional de Amán, sede del amistoso que enfrentará a España con Jordania el jueves a las 17:00 horas. Cumplimentado el trámite, los internacionales españoles volarán a Qatar, adonde tienen previsto llegar pasada la medianoche del jueves. Desde ese momento, su campo base será la Universidad de Qatar, situada en Doha.

España debutará en el Mundial el miércoles 23, midiéndose a Costa Rica a las 17:00 horas en el Estadio Al Thumama. El domingo 27, a las 20:00 horas, se verá las caras con Alemania en el Estadio Al Khor y cerrará la fase de grupos contra Japón el 1 de diciembre, también a las 20:00 horas en el Estadio Internacional Jalifa.