La Deportiva suma un punto de carácter y se agarra al sueño

El Sporting quiso sobreponerse a la importante baja de Djuka dominando el partido desde el inicio. Los de David Gallego monopolizaron el balón en los primeros compases de juego, llegando con asiduidad y reteniendo la pelota en sus pies.

La Deportiva, que no estaba muy incómoda con este escenario, empezó a sufrir en estos minutos. Los centros laterales y las jugadas rápidas de los asturianos ponían en aprietos a la zaga blanquiazul. Caro, en dos ocasiones ante Pablo Pérez y Nacho Méndez, evitó que el gran arranque sportinguista tuviera premio.

Los de Bolo se supieron defender y el dominio sportinguista fue remitiendo. La Deportiva supo bajar las revoluciones del partido durmiendo el balón en sus pies, reteniendo más la posesión y no dejando estar tan cómodo al conjunto asturiano.

A raíz de ello, el equipo berciano se fue estirando y llegó su primera gran ocasión. En un centro lateral, Aguza remató de semichilena, con potencia y con bote, lo que obligó a hacer una gran intervención a Mariño para evitar el tanto local.

El partido pasó a minutos de gran igualdad donde parecía que sólo un error o una genialidad podrían cambiar esta tendencia. Y así fue. Un error de Caro, que se precipitó en una salida, acabó con un penalti a favor del Sporting que Pedro Díaz transformó instantes antes del descanso, al que se llegó con desventaja de la Deportiva (0-1).

Tras el paso por vestuario, Bolo retiró a Sielva, lesionado, y las malas noticias se sucedieron para los bercianos. Pablo Pérez, en la primera acción de la reanudación, cabeceó un gran envío lateral a balón parado de Pedro Díaz para poner el 0-2. El partido parecía en manos del Sporting.

Pero la Deportiva no se rindió y dio un paso adelante que daría sus frutos rápidamente. Los gijoneses, uno de los equipos más sólidos y fiables a nivel defensivo, metieron a los de Bolo en partido. En primer lugar, Curro recortó distancias con un disparo desde la frontal en el que Mariño, a la hora de atrapar el balón, erró y el esférico se le escurrió.

Dos minutos después, fue Valcarce el beneficiado en un error en el pase de Pedro Díaz, presionado por Curro, para quedarse sólo ante Mariño y, tras tocar el meta, anotar el 2-2 en apenas dos minutos. El árbitro, en primera instancia, anuló el gol, pero tras revisarlo en el VAR y comprobar que no había nada mínimanente punible, dio validez al tanto.

El partido entraba en una nueva fase, con igualdad en el marcador y la Deportiva impulsada por la inercia de los últimos minutos y haber neutralizado un 0-2 en apenas 120 segundos. Los blanquiazules disponían de más balón, pero el choque estaba equilibrado en todos los sentidos.

La polémica no abandonó el partido y, en el ecuador de esta segunda mitad, el colegiado anuló un gol al Sporting en un córner por falta que, tras ser revisado durante varios minutos en el VAR, se certificó la nulidad del tanto, lo que mantenía el empate en el marcador, pero el cuadro asturiano empezaba a mostrar, de nuevo, las garras.

Otro contratiempo se cruzó en el camino blanquiazul, con la lesión de Gaspar, que había entrado en el descanso, en unos minutos donde el equilibrio era total y ninguno de los dos equipos quería arriesgar en exceso para no perder el punto que ambos tenían en el bolsillo.

No hubo grandes ocasiones en estos minutos hasta que Javi Fuego, en un balón suelto en una falta, remató con fuerza pero apareció Caro para negar el tanto al mediocentro asturiano. Creció el Sporting en estos minutos y Campuzano, que debutaba este domingo con los rojiblancos, tuvo otra oportunidad en la que de nuevo el meta onubense de la Deportiva fue fundamental.

Finalmente, la Deportiva sacó un punto clave para seguir soñando. Los bercianos desaprovecharon la oportunidad de ganar y meterse en puestos de playoff, pero se mantienen a un sólo punto de la sexta plaza que ostenta el Rayo Vallecano y se permite seguir ilusionándose con algo más que la permanencia.