La Deportiva se empeña en seguir soñando

No era un día más. Pese al lógico malestar de muchos clubes, entre ellos la Deportiva, que no entienden por qué unos sí y otros no, los de Bolo eran protagonistas en un día histórico: el de la vuelta del público a un partido de fútbol profesional en España más de un año después.

Con unos 4.000 hinchas en las gradas de Castalia, Bolo apostó por cambios en el once, algunos obligados como las entradas de Manu García y Yac por los sancionados Caro y Castellano, además del regreso de Ríos Reina.

Comenzó mejor el Castellón, que se jugaba buena parte de sus opciones de permanencia tras poner fin la pasada semana a una buena dinámica. Los albinegros se encomendaban a su estadio y a su afición para regresar a la buena senda y, con Ortuño y Jorge Fernández activos en ataque, inquietaron a los de Bolo en los primeros minutos.

Fue Jorge Fernández el que tuvo la primera gran ocasión con una jugada personal que acabó con un disparo alto. La Deportiva, más allá de jugadas aisladas de Valcarce y un Yuri que cumplía 400 partidos como blanquiazul, no lograba acercarse a la meta de Óscar Whalley.

Poco a poco, el conjunto berciano fue equilibrando el partido. La sensación ya no era de superioridad castellonense y los de Bolo enseñaban las garras por medio de un Juergen que, con un disparo desde la frontal, tuvo la mejor oportunidad hasta ese momento.

El choque, una vez superado el ecuador de la primera mitad, se convirtió en un partido totalmente igualado, con las defensas sabiendo sostener a los ataques y con Juergen tomando protagonismo en el conjunto de Bolo. El Castellón también tuvo ocasiones, como un remate alto de Señé y un testarazo de Arturo en una posición franca que se fue fuera, si bien es cierto que la jugada había quedado anulada por fuera de juego.

Nadie lograba tener esa pizca de fortuna y acierto necesaria para el gol. Pero hay un jugador que, esta temporada, desborda estas dos cualidades. En un balón que no logró despejar correctamente Señé, Sielva se encontró con una gran oportunidad. Con temple y sangre fría, el mediocentro envió un disparo colocado, desde dentro del área, al palo largo justo antes del descanso que supuso el 0-1. La Deportiva, con poco bagaje ofensivo, se iba por delante al descanso a base de efectividad.

Esta circunstancia obligaba a un urgido Castellón a salir con una actitud más ofensiva en la segunda mitad y así lo hicieron los de Juan Carlos Garrido. La Deportiva sabía que era momento de saber sufrir y aprovechar alguna salida ante un rival que intentaba empatar el choque cuanto antes para creer en la victoria.

Arturo, en la reanudación, tuvo una de las más claras respondida por una contra de la Deportiva que no pudo culminar Juergen. Acto seguido, Ortuño no acertó con un remate a un gran centro lateral en boca de gol en unos minutos frenéticos y de gran ritmo en los que la premisa para Bolo era clave: resistir.

Supo aguantar esos minutos de agobio el conjunto berciano para llevar el partido a un tramo de tranquilidad. El Castellón era todo ímpetu e intención pero la Deportiva, a base de orden y experiencia, estaba controlando al conjunto local.

Cuando robaba el balón, el cuadro de Bolo apostaba por posesiones largas que bajaran las pulsaciones de partido ante un rival que, con el paso de los minutos, crecía en nervios y jugaba cada vez más directo.

Los albinegros, por inercia, comenzaron a enviar balones al área yen uno de ellos, a raíz de un saque de banda, Bodiger envió un remate casi involuntario al poste. Respondió la Deportiva con dos ocasiones clarísimas. La primera fue de Valcarce que, en su intento de regatear a Whalley, se topó con uno de los defensas locales y, apenas un minuto después, Kaxe cabeceó un gran centro que el meta castellonense envió a córner.

Sufrió el conjunto de Bolo, especialmente a balón parado, donde el Castellón ganó casi todos los envites y generó varias ocasiones de gol. Después de la de Bodiger, fue Gálvez el que pudo empatar pero una curiosa intervención de Manu García, con una sola mano, evitó la igualada albinegra.

Con el conjunto local volcado, la Deportiva remató el partido. Doncel comandó una contra que llevó a la perfección y en la que cedió el choque para Valcarce que, tras recortar a su marcador, definió ante Whalley para dar el triunfo a los bercianos.

De esta manera, la Deportiva ha vuelto a ganar cuatro meses después a domicilio - con el mismo marcador, 0-2, que ante el Málaga el 23 de enero - y mantiene vivas sus opciones de seguir peleando por el playoff con un duelo entre Girona y Sporting que, con este marcador en Castalia, les acercará a ese sueño un poco más.