Un gol anulado a cada equipo deja en tablas un igualado partido en el Toralín

La salida fue intensa por parte de ambos equipos y pronto empezaron a poner sus armas sobre el césped del Toralín. En la primera acción ofensiva, la Ponferradina vería cómo le anulaban el el primer tanto de la mañana, cuando una falta botada desde el pico del área acababa en una intervención de Pablo Valcarce, que se encontraba en posición antirreglamentaria, y el balón acababa en el fondo de la red sin validez.

Tomó entonces las riendas del encuentro el Fuenlabrada. El ritmo alto que imprimían los madrileños empezaba a maniatar al conjunto de Jon Pérez Bolo. Nteka quebró por dos veces sobre Pascanu y su tiro lo tuvo que despejar a córner Caro.

Se vino arriba el cuadro de José Luis Oltra, que ponía cerco al área deportivista. La presión alta era efectiva y las ocasiones se sucedían. Pathé Ciss, desde muy lejos, puso a prueba los puños del meta; y Garcés, desde el interior del área, también obligaba al cancerbero a salvar los muebles para los locales.

Un sencillo disparo de Curro, al paso por el minuto 27, que se marchó muy alto parecía cambiar el chip y el rumbo del partido. Bajaron físicamente los del sur de Madrid y de ello se aprovechó la Ponferradina. Avanzaron metros los bercianos y de nuevo a balón parado causaron peligro con un remate de Curro en el primer palo que se marchó fuera.

Antes del descanso, una magistral asistencia de tacón de Yuri se convirtió en la mejor ocasión hasta el momento. Curro se quedó mano a mano con Belman, pero no supo definir ante el portero.

Mantuvo la inercia la Deportiva tras el descanso y siguió metiendo en su campo a los fuenlabreños. Valcarce quiso intimidar al meta con un disparo que éste embolsó contra su pecho.

Pathé Ciss volvía a llevar peligro al área rival con una falta directa que botó el jugador desde muy lejos y que se marchó por encima del larguero.

Buscó Bolo con sus cambios que el equipo tuviera más presencia en ataque y retomar la senda de la victoria. Y es que el gol parecía más cerca para los blanquiazules. En un ajustado fuera de juego, a punto estuvo de provocar penalti Valcarce, pero la acción acabó invalidada en el momento en que el colegiado se dirigía al punto de penalti.

Cuando parecían haber firmado el armisticio ambos conjuntos, pudo llegar el tanto que desequilibrara las cosas. Mula ponía un centro forzado desde la línea de fondo y entre la defensa berciana aparecía Nteka, que levantaba el pie para desviar el balón y sorprender a Caro estableciendo el 0-1 en el Toralín. Dudó el colegiado en señalar juego peligroso, y tuvo que ser el VAR quien aclaró a Ávalos Barrera para que optara por anular el tanto.

No hubo tiempo para más y ambos firmaron la paz y se conformaron con un punto que deja a los bercianos con 49 y a un partido, al menos, de distancia del playoff.