Sandro se libera y el Valladolid disfruta

La clave estará en salir al terreno de juego con «una gran intensidad y ritmo» para «minimizar» las virtudes del cuadro balear, que, según ha explicado Sergio, «lleva mucho tiempo con su entrenador -Vicente Moreno- y los jugadores se entienden muy bien con él».

Eso les permite ser «un equipo fluido en ataque y bien estructurado, que funciona como un bloque y que muerde y aprieta a un alto nivel», de ahí que la plantilla vallisoletana esté obligada, al menos, a igualar ese grado de intensidad del conjunto bermellón, que buscará sus primeros puntos a domicilio.

El Valladolid se ha mostrado más regular que su rival de esta jornada, con tres victorias, cinco empates y tres derrotas, y con ganas de resarcirse de la derrota sufrida el martes en el Camp Nou (5-1), la cual ha tenido una notable incidencia en su diferencia de goles.

Los blanquivioletas ya se han puesto el mono de trabajo con el objetivo de volver a ofrecer un nuevo triunfo a su afición, que además servirá para ampliar el colchón de seguridad de puntos antes de visitar al Alavés en la próxima jornada y afrontar después un nuevo parón por los compromisos de las selecciones nacionales.

La lista de convocados está compuesta por: Jordi Masip, Pedro Porro, Fede Barba, Kiko Olivas, Guardiola, Enes Ünal, Óscar Plano, Hervías, De Frutos, Lunin, Alcaraz, Moyano, Antoñito, Toni Villa, Sandro, Míchel, Joaquín y Salisu.

El Mallorca lleva cuatro salidas y cuatro derrotas. Ahora intentará romper esa racha negativa a domicilio. Décimoséptimos con 11 puntos, los bermellones han perdido en los campos del Valencia (2-0), Getafe (4-2), Alavés (2-0) y Leganés (1-0).El equipo que dirige el técnico Vicente Moreno se siente mucho más fuerte en Son Moix -donde incluso dobló la rodilla el Real Madrid hace dos jornadas (1-0)- pero no logra mantener ese nivel de su juego en los desplazamientos.

Moreno podrá contar con todos los futbolistas que alineó en el empate de la última jornada en Palma ante el Atlético Osasuna (2-2), incluido Salva Sevilla, que evitó la quinta tarjeta amarilla que acarrea un partido de sanción.

Es probable que Joan Sastre vuelva al lateral derecho de la defensa (Moreno le dio descanso ante el Osasuna), y que Fran Gámez o el ghanés Lumor Agbenyenu se sitúen por la banda izquierda.

También, el técnico mallorquinista tendrá que decidir si mantiene al japonés Take Kubo en el banquillo o, sí por el contrario, recurre a él para activar el ataque de su equipo.Kubo, cedido por el Real Madrid, llegó a Palma como fichaje estrella de la temporada, pero ante el conjunto navarro no jugó ni un solo minuto.

El Mallorca no se enfrenta al Valladolid desde la temporada 2012-2013.En el José Zorrilla perdió 3-1 y en Son Moix ganó 4-2 en la última jornada del campeonato, un triunfo que no impidió su descenso a Segunda.

Sandro Ramírez puso la guinda, con un golazo desde la central del área, totalmente imparable, que permitía romper con la maldición que le había perseguido desde hace dos temporadas, a un Real Valladolid entregado, que controló muy bien el partido, ante un rival que fue de más a menos.

El conjunto bermellón salió muy centrado, controlando el balón y buscando la portería local desde el primer minuto, con un Lago Júnior que dejó clara su capacidad de desbordar por la banda izquierda, facilitando la primera ocasión para su equipo en los primeros compases. Sastre recibió el balón pero su lanzamiento se fue por encima de la portería. Primer aviso del Mallorca. Y este sirvió para que el Real Valladolid se desperezara y comenzara a mirar hacia el área mallorquina, aunque hasta el minuto 15 no llegaría el primer disparo a puerta, con Óscar Plano como protagonista.

Fabricio lo detuvo sin problema, pero esa ocasión permitió centrar más a los de Sergio González, que no podían permitirse el lujo de perder la concentración, puesto que el rival, con el balón, encontraba fluidez para plantarse en el área del Real Valladolid y Budimir no desperdiciaba ningún fallo.

La defensa vallisoletana se empleaba a fondo para frenar a los baleares, sin renunciar al ataque. De hecho, sería Óscar Plano de nuevo el que, tras una buena jugada de Moyano por la banda izquierda, pudo inaugurar el marcador, aunque su disparo salió por encima de la portería defendida por Fabricio.

Entró el partido en una dinámica más lenta, con un Mallorca perfectamente plantado en el campo, y un Real Valladolid que no parecía encontrar ideas ofensivas. Pero supo aprovechar a la perfección un saque de esquina que Míchel sirvió para que Joaquín cabeceara y dejara el balón en el fondo de la meta bermellona. Un gran gol e importante desde el punto de vista moral, puesto que solo faltaban cinco minutos para el descanso. La defensa blanquivioleta se cerró para impedir que el Mallorca pudiera crear peligro y logró llegar al final de la primera mitad con esa ventaja en el marcador.

La presión estaba sobre los jugadores del Mallorca, pero los vallisoletanos salieron con intensidad para frenar el posible empuje del visitante. Y Ünal sorprendió. Luchó por el balón en el área bermellona con tres defensores y Fabricio quien derribó al delantero turco, en un claro penalti que señaló sin dudar Medié Jiménez. El propio Ünal fue el encargado de transformarlo, con un disparo raso y potente, que no pudo detener el meta canario.

El Real Valladolid tomaba aire con ese segundo tanto y también impulso, lo que propiciaría una clara oportunidad para aumentar su casillero, que Óscar Plano desperdició en un uno contra uno contra Fabricio.

El Real Valladolid tenía hambre. Y Óscar Plano pudo ampliar la renta, pero volvió a encontrar al meta del Mallorca. Sergio González quiso alimentar esa ambición goleadora dando entrada a Sandro, un jugador con necesidad de reivindicarse y que regresaba a la convocatoria tras salir de lesión.

El juego se volvió caótico en los compases finales, con numerosas tarjetas y faltas, con un Valladolid que devolvió la ilusión a los aficionados, totalmente volcados con el equipo, y un Mallorca que no pudo jugar con comodidad y que fue incapaz de llegar con peligro al área blanquivioleta.

No pudo tener mejor final de fiesta el conjunto local. En tiempo de prolongación, Sandro se sacó un disparo potente desde la central del área para marcar un auténtico golazo que fue celebrado por todo el equipo, ya que significaba romper la mala racha del jugador gran canario tras dos años sin marcar.