Kike Salas, detenido por forzar amarillas para apuestas ilegales

Kike Salas fue detenido este martes por su presunta participación en una trama de apuestas. El futbolista del Sevilla habría provocado que le sacasen tarjetas amarillas para que gente de su entorno se lucrara con apuestas amañadas. El canterano del Sevilla prestó declaración ante un juzgado de Morón de la Frontera, su localidad natal, por un supuesto delito de estafa, antes de quedar en libertad, a la espera de que el juez le cite como investigado.

Al parecer, el zaguero del Sevilla, que se acogió a su derecho a no declarar, habría acordado con personas de su entorno, que también están siendo investigadas, forzar acciones para que le sacasen cartulinas amarillas en varios partidos de Liga. De esta forma, los colaboradores de Kike Salas pudieron efectuar las apuestas sabiendo lo que iba a pasar posteriormente sobre el césped.

Los investigados habrían participado en unas 30 apuestas amañadas en seis establecimientos de Morón de la Frontera, por las cuales habrían logrado ganancias de alrededor de 10.000 euros en un mes, de acuerdo con las primeras indagaciones. Los encuentros sospechosos se disputaron en el tramo final de la campaña pasada. LaLiga se personará como acusación en un proceso por el que también fueron detenidos dos amigos de Kike Salas.

La unidad de la Policía Nacional especializada en apuestas ilegales está llevando a cabo la investigación de los presuntos hechos delictivos, la cual se centra en una serie de partidos en los que el Sevilla no se jugaba nada al encontrarse en una zona tranquila de la tabla, lejos tanto de los puestos de descenso como de los que daban acceso a competiciones europeas.

Kike Salas vio un total de diez tarjetas amarillas a lo largo de la campaña 2023-24. Siete de ellas se produjeron en los encuentros que el Sevilla disputó entre la jornada 30 y la jornada 38 de la pasada Liga, lo que le convirtió en el futbolista más amonestado en ese tramo del campeonato. Varias de esas cartulinas llegaron en los últimos minutos de los citados partidos, lo que alimenta aún más las sospechas. La Policía clonará el móvil del futbolista para investigar los mensajes que pudo intercambiar con otros sospechosos.

Formado en la cantera del club nervionense, Kike Salas dio el salto al primer equipo del Sevilla en la temporada 2022-23, cuando Julen Lopetegui le hizo debutar en un partido de Liga disputado ante el Espanyol el 10 de septiembre de 2022. Meses después, tras renovar su contrato, fue cedido al Tenerife, club en el que pasó el resto de aquel curso. Regresó al Sevilla en el verano de 2023 y en la presente campaña se ha convertido en un habitual en los onces de Francisco Javier García Pimienta.

A sus 22 años, Kike Salas acumula un total de 54 apariciones con el Sevilla, en las que ha marcado cuatro goles y repartido tres asistencias. Dieciséis de esos partidos corresponden al curso actual, donde se ha desempeñado principalmente como central pero también como lateral izquierdo.

El caso de Kike Salas recuerda a los de los brasileños Lucas Paquetá (West Ham) y Luiz Henrique (ex del Betis que actualmente pertenece a Botafogo), quienes también fueron acusados en su día de forzar varias cartulinas amarillas durante la temporada 2022-23. En concreto, la federación inglesa acusó a Paquetá de forzar cuatro tarjetas amarillas para que hasta 60 amigos y familiares ganasen un total de 118.000 euros. Por su parte, Luiz Henrique se habría visto beneficiado con dos transferencias por valor de unos 6.550 euros a comienzos de 2023 como consecuencia de varias tarjetas amarillas que vio mientras militaba en el Betis. Según las autoridades brasileñas, dichos pagos los efectuaron familiares de Paquetá.

Igualmente, el futbolista italiano Sandro Tonali se vio involucrado en una trama de apuestas poco después de llegar al Newcastle. La Federación Italiana de Fútbol (FIGC) acusó al centrocampista de realizar entre 40 y 50 apuestas en partidos de fútbol mientras militaba en el Milan, club al que perteneció entre 2020 y 2023, y del que salió rumbo al equipo de las urracas a cambio de 60 millones de euros.

Tonali, que apostó más de cien mil euros, admitió los cargos y fue sancionado con diez meses sin poder vestirse de corto, desde octubre de 2023 hasta el 27 de agosto de 2024. Tras someterse a un tratamiento contra la ludopatía y renunciar al 90% de su salario mientras estuvo alejado de los terrenos de juego, Tonali regresó a la acción con el Newcastle al comienzo de la presente campaña.

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