La Real Sociedad se complica la vida en Europa

La Real Sociedad esperaba saciar la sed de puntos que tenía en la Europa League aprovechando la visita que rindió este jueves a la República Checa, pero regresa a San Sebastián teniendo que lidiar con las consecuencias de una mala resaca. Un tanto de Vasulin sobre la bocina le dio al Viktoria Pilsen un triunfo que oscurece el horizonte de los donostiarras en la segunda competición continental y mejora el de la escuadra de la ciudad cervecera.

Después de que un gran gol de cabeza de Óskarsson tras centro de Oyarzabal permitiese que el conjunto de Imanol Alguacil igualase un marcador que se había puesto favorable al bando local merced a una diana del peligrosísimo Adu, los visitantes empujaron y dispusieron de ocasiones para darle la vuelta al resultado pese a que el Viktoria Pilsen también enseñó las garras. Sin embargo, la fortuna le resultó esquiva a la Real Sociedad con un desenlace que le sitúa fuera de los puestos que le permitirían disputar la siguiente ronda.

Con cuatro puntos en otras tantas jornadas y vigesimoquinta en la tabla, la Real Sociedad tendrá que remar muy duro cuando todavía le resta medirse adversarios del calibre del Ajax o la Lazio para estar al menos en la ronda de dieciseisavos de final, puesto que el pase directo a octavos se antoja a día de hoy casi una quimera.

Quedó satisfecho Imanol Alguacil con el convincente triunfo que logró la Real Sociedad el pasado domingo ante el Sevilla en el Ramón Sánchez Pizjuán. Por esa razón, y atendiendo también a la importancia de la cita, no efectuó el técnico de Orio más modificación en su once respecto al señalado duelo en tierras hispalenses que la entrada de Óskarsson en la punta de lanza, sacrificando para ello a Brais Méndez en la sala de máquinas. Compensó dicho movimiento desplazando a Sergio Gómez a la posición de volante y otorgó las astas exteriores del tridente ofensivo a Kubo, que alcanzó los cien partidos como futbolista txuri urdin, y a Oyarzabal.

Abanderó el capitán de la Real Sociedad una buena toma de contacto con el partido por parte del cuadro donostiarra, que sumó tres acometidas interesantes por banda izquierda pero se vio pronto por debajo en el marcador. Había resistido con cuajo el Viktoria Pilsen ese inicio con brío de la Real Sociedad y equilibrado paulatinamente las fuerzas cuando Adu logró culminar un contragolpe batiendo a Remiro con un derechazo raso que entró por el palo corto.

La verticalidad del atacante ghanés era una de las principales armas del Viktoria Pilsen, un equipo correoso y bien trabajado por el veterano técnico checo Miroslav Koubek, relegado este jueves a la grada por la sanción que arrastraba. Sufrió con sus embestidas la zaga de la Real Sociedad en un tramo en el que el bloque visitante arriesgó en busca del empate.

Le faltaba precisión en el pase a la Real Sociedad, atenazada por las marcas individuales que planteaba el Viktoria Pilsen hasta que Oyarzabal rompió las cadenas con una acción que le sirvió para abrirse paso frente a un tierno Paluska y soltar un centro medido que Óskarsson mandó a la red con un extraordinario remate de cabeza. Desperdició poco después Oyarzabal una ocasión pintiparada para darle la vuelta al marcador al controlar mal un magistral envío de Zubeldia a la espalda de los centrales que había dejado al atacante solo delante del portero.

Dominaba la Real Sociedad, pero el Viktoria Pilsen amenazaba con peligrosos zarpazos que ponían a prueba la resistencia txuri urdin. Abortó Remiro un violento disparo de Sulc en un duelo que se abrió más en la segunda parte. Respondió Oyarzabal con un latigazo que repelió Jedlicka y replicó a su vez Jirka con un golpeo que cruzó en exceso el exfutbolista de Mirandés y Oviedo.

Acudía más exigido a la riña el Viktoria Pilsen, que contaba por empates sus tres primeros choques en la liguilla, lo que motivó que el cuadro checo diese un paso al frente y pusiese de nuevo a prueba a Remiro con una vaselina de Adu que atajó el arquero. Para entonces había movido ficha ya Imanol Alguacil, que alistó a Sheraldo Becker con la esperanza de que el internacional con Surinam pudiese aprovechar con su velocidad los espacios que se generaban, antes de dar paso también a Brais Méndez en la medular sacrificando a Javi López y reubicando a Sergio Gómez como lateral izquierdo.

Tejieron los dos relevos de la Real una acción punzante en la que Óskarsson molestó a Oyarzabal y el cuadro donostiarra siguió empujando en busca del triunfo, pero un desvió de Vasulin tras disparo de Kalvach acabó costándole una derrota injusta que no pudo evitar Oyarzabal con una gran ocasión tras peinada de Óskarsson y que le complica mucho la vida en Europa.

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