Cuartos | Ida

Foden y De Bruyne desequilibran una batalla táctica entre estilos

El Manchester City se adelantó en la eliminatoria contra el Atlético con un tanto del belga a pase del inglés, el as bajo la manga que Guardiola reservó para el final

Martes, 5 de abril 2022, 00:27

Dos equipos de autor, dos idiosincrasias, dos estilos y el objetivo común de levantar alguna vez una orejona, ese gran título que falta en en las vitrinas de 'citizens' y colchoneros, rivales hoy en cuartos de la Champions. En el fútbol moderno quizá no haya ... dos técnicos que visibilicen tanto sus modelos opuestos como Pep Guardiola y Diego Simeone, los dos estrategas mejor pagados del mundo, dos iconos sobre los que se sustentan el Manchester City y el Atlético de Madrid. Diametralmente opuestas en la fórmula para llegar al resultado, sus dos escuadras miden sus fuerzas este en el Etihad Stadium, donde los colchoneros estarán arropados por unos 3.000 hinchas.

Publicidad

Para el City, forjado a base de los petrodólares de los Emiratos Árabes, y el Atlético, instalado entre los grandes desde que el Cholo aterrizó en el Calderón hace más de diez años, la Copa de Europa es una obsesión. Los de Mánchester estuvieron a punto el curso pasado, pero cayeron en la final ante el Chelsea. Los rojiblancos la rozaron tres veces: en la final de Heysel en 1974, con aquel gol de Schwarzenbeck que contrarrestó el tanto de Luis Aragonés y forzó un partido de desempate ante un Bayern imparable, y los dos perdidas ante el Real Madrid en la prórroga de 2014 y en los penaltis de 2016. Para llegar a esa última final, celebrada en Milán, el Atlético ya tuvo que protagonizar el milagro de apartar del camino en semifinales al Bayern de Pep Guardiola, fruto del 1-0 y en la ida y de una resistencia conmovedora (2-1) en la capital bávara.

En 2009, Simeone visitó un entrenamiento del Barcelona de Guardiola. «Hablamos. '¿Cómo hacéis la salida de atrás, la presión alta o media, cómo es esto, cómo atacáis los espacios pequeños o lo que sea?'. Y me dijo (Simeone) una cosa que estuvo muy bien y aprendí mucho. Creo que con el tiempo refleja muy bien la personalidad del Cholo. Le digo hacemos esto y me dijo 'esto yo no lo siento, a mí esto no me gusta'», rememora Pep en un pasaje del documental 'Simeone, vivir partido a partido'. Dicho lo cual, dijo Guardiola ayer que él no tiene la percepción de que el Atlético sea un equipo tan defensivo sino un rival «tácticamente muy rico», capaz de adaptarse a diversas circunstancias y sobre el que está pensando como poder «tocarle las narices».

Superar barreras

No es este Atlético un equipo tan perro como aquél que superaba barreras y aspiraba a todo. Este curso se ha mostrado mucho más vulnerable menos contundente en las áreas, pero no es menos cierto que llega al Etihad en su mejor momento de la temporada. Desde que tocó fondo con la derrota ante el Levante en el Wanda, ha encadenado seis victorias en Liga y ha superado al Manchester United, venido a menos pero trufado de estrellas y con más pedigrí que el City, un nuevo rico. Capaz de asaltar el templo de Old Trafford hace solo tres semanas, como años antes ya hizo en Stamford Bridge y en Anfield, el Atlético repite un reto colosal.

Se presenta el campeón español sin dos de sus titulares en esta reacción del último mes y medio, más de resultados que de juego. Ni el central Giménez ni el medio Herrera han viajado a Inglaterra por culpa de las lesiones. El otro ausente es el belga Yannick Carrasco, que cumple su tercer y último partido de sanción por su expulsión en la fase de grupos frente al Oporto.

Publicidad

El Cholo confía en el bloque, en su capacidad de supervivencia, en el poder de la mente de sus discípulos que siempre tienen que creer y, sobre todo, en el estado de gracia de Joao Félix. Desde que es titular indiscutible y juega de delantero, ha firmado seis goles en los últimos seis encuentros. Como dato curioso, vuelve Savic al escenario donde estuvo una campaña con solo 20 años, antes de crecer en la Fiorentina. «Entonces no estaba preparado», confiesa el central montenegrino.

Para el City, se trata de la primera etapa dura hacia su Everest. En doce días, se jugará mantenerse vivo en tres competiciones. Tras recibir al Atlético, se jugará media Premier ante el Liverpool el próximo domingo en este mismo escenario, ya que el City solo aventaja en un punto a los de Jürgen Klopp. Luego, la vuelta contra los rojiblancos, el día 13 en el Metropolitano, y tres días después la semifinal de la FA Cup, también contra el Liverpool. Maneja como nadie el tiempo y el espacio el City, que sin un ariete de referencia sigue soñando con Haaland pero presenta una media de más de dos goles por partido en la Premier y ha marcado 23 goles en ocho partidos de Champions. No estará Rúben Dias, lesionado.

Publicidad

El Manchester City golpeó primero en la batalla de estilos contra el Atlético. Cada uno con sus armas, ambos equipos mantuvieron un intenso duelo táctico que el talento local desequilibró en el tramo final. Aguantó el conjunto de Simeone durante una hora larga. Lo hizo sin demasiados apuros, pese al dominio en el control de la pelota que se esperaba en un rival comandado por Guardiola. Sin embargo, Pep transmitió a los suyos paciencia y confianza en el ideario propio y sobre todo se guardó un as bajo la manga para los minutos finales. Introdujo el catalán a Phil Foden en el tramo decisivo y el mayor talento inglés del momento acabó decidiendo, revolucionando el partido con un pase de gol que otro virtuoso como De Bruyne terminó por hacer bueno.

La calidad local acabó por decidir un partido que se escenificó bajo el guion que todos aventuraban. Control de la pelota insistente del City de Guardiola, el hombre que contempla la posesión como mandamiento, y el Atlético bien replegado. Sus intenciones se vieron en un gran pase de volea de Joao Félix para la velocidad de Marcos Llorente, contrarrestada con problemas por Aké. Neutralizar el dominio 'sky blue' con un gran despliegue táctico y morder a la mínima opción de recuperar la pelota, pilares de plan del Cholo.

Sin tampoco apuros serios para el Atlético, lo cierto es que el campeón inglés cercaba el área rojiblanca e iba avisando a su rival. Cancelo disparó desviado, De Bruyne se topó con un zaguero en el remate y Laporte la echó fuera de cabeza. Necesitaba algo más de respiro el conjunto colchonero, pisar dominios locales aunque solo fuera para tomar oxígeno. Una carrera de Joao Félix al espacio por el costado izquierdo obligó al buen repliegue 'citizen' y le subió los decibelios a los ánimos de la hinchada colchonera en el Etihad.

Manchester City

Ederson, Cancelo, Stones, Laporte, Aké, De Bruyne, Rodri, Gündogan (Grealish, min. 68), Mahrez (Foden, min. 68), Bernardo Silva y Sterling (Gabriel Jesus, min. 68).

1

-

0

Atlético

Oblak, Vrsaljko, Savic, Felipe, Reinildo, Lodi, Llorente (Cunha, min. 60), Kondogbia, Koke (De Paul, min. 60), Joao Félix (Lemar, min. 81) y Griezmann (Correa, min. 60).

  • Gol: 1-0: min. 70, De Bruyne.

  • Árbitro: Istvan Kovacs (Rumanía). Amonestó a De Paul, Correa y Vrsaljko, por el Atlético, y Gabriel Jesus y Ederson, del City.

  • Incidencias: Partido de ida de cuartos de final de la Liga de Campeones disputado en el Etihad Stadium.

Fue mejorando con el paso de los minutos el Atlético, con capacidad para al menos estirarse ocasionalmente. Bien es cierto que Ederson contemplaba el encuentro inédito más allá de su participación en la circulación de balón diseñada por Guardiola, pero tampoco se puede decir que Oblak viviese demasiado estresado. Ni un tiro entre los tres palos hubo en toda la primera parte. Una auténtica batalla táctica, fruto del choque de estilos entre dos conjuntos de autor, trabajados hasta el más mínimo detalle.

La partida de ajedrez requería algún tipo de movimiento táctico y Guardiola lo llevó a cabo sin cambios, otorgándole a Sterling la función de falso '9' y situando a Bernardo Silva por la izquierda. Pareció surtir efecto a las primeras de cambio, con un disparo de Gündogan en el área y a la media vuelta que cerca estuvo el propio Sterling de empujar a la red. El partido se abrió y el Atlético lo aprovechó para desplegarse a la contra. Griezmann no pudo acertar en el último pase tras un esfuerzo hercúleo y también llegó sin fuelle Llorente al momento de la verdad, rematando a las manos de Ederson cuando atisbaba la meta.

Justo a media hora del final Simeone refrescó a su equipo con un triple cambio. Dio descanso a los agotados Koke, Llorente y Griezmann, tres sacrificados trabajadores que pasaron el testigo a De Paul, Cunha y Correa. Oblak se estrenó para desviar con la pierna un balón que él mismo había dejado rechazado ante el lanzamiento de falta de De Bruyne y Guardiola también movió el árbol. Gabriel Jesus, Grealish y Foden de golpe. Casi nada, lujos al alcance de muy pocos. El tercero se estrenó en el duelo metiendo un pase fantástico para De Bruyne, un centrocampista con especial inclinación hacia el gol, como demostró para definir frente a Oblak. El gol no descompuso a ninguno de los contendientes, conscientes ambos de que todavía resta el asalto decisivo en el Metropolitano, al que el Atlético llega vivo.

Este contenido es exclusivo para suscriptores

Disfruta de acceso ilimitado y ventajas exclusivas

Publicidad