El Júpiter insiste en sus malas costumbres

La realidad es que los 'cachorros' no cuajaron su mejor partido. La inercia positiva que vive el cuadro burgalés se dejó sentir en el campo. Sin dominador inicial, poco a poco las ocasiones empezaron a caer del lado local. La más clara fue para Iván Canelo, que se topó con el larguero.

Sin embargo, en la reanudación, Julio Algar aprovechó un balón parado para hacer el 0-1 y poner en franquicia el partido.

El nerviosismo parecía invadir al Briviesca, que empezó a ver tarjetas amarillas y se desesperaba con el resultado. El premio a su buenhacer no llegó hasta el minuto 80, cuando Soto lograba el empate y dejaba sin triunfo al Júpiter.

La roja a Maestu, dio esperanzas de victoria a los visitantes que, sin embargo, acabaron firmando las tablas.