Iván Morante crece en el Castilla

En una campaña donde ha encontrado regularidad y presencias continuadas en el once madridista, únicamente alteradas por una lesión de rodilla que le mantuvo dos meses al margen de los terrenos de juego, el jugador leonés, formado en la cantera del CD Ejido, está siendo uno de los destacados en el filial blanco.

Con más de 1.000 minutos ya jugados en Primera RFEF como uno de los habituales en la 'sala de máquinas' del Castilla, Morante pudo debutar en verano con el primer equipo blanco y se ha asentado en el filial, donde sus números reflejan la importancia que tiene para Raúl González y su nivel para liderar desde el centro del campo al conjunto madrileño.

Morante ha sumado un enorme acierto en el pase, del 85%, en lo que va de temporada, entregando bien 390 de los 459 pases intentados. Como es lógico, el mayor número de errores aparecen en los envíos en las inmediaciones del área y a este punto crítico del juego.

Pero su trascendencia en el fútbol del Castilla se mide en el éxito de sus pases hacia adelante. Acierta en más de tres de cada cuatro pases progresivos que intenta y, lo que es más destacable en un mediocentro como él: juega más hacia adelante que hacia atrás.

Morante es un mediocentro valiente, con cualidades defensivas y capacidad de organizar el juego que ha probado más del triple de pases hacia adelante, superando líneas, que hacia atrás, el tradicional pase de seguridad tan utilizado por jugadores que ocupan su demarcación.

Hasta ahora, ha enviado 52 balones atrás (48 de ellos exitosos) por los 176 hacia adelante, errando tan sólo 41 de ellos, lo que supone un porcentaje de acierto de casi el 77%, un valor muy alto para futbolistas que se encargan de manejar el juego.

Es un año fundamental en el crecimiento de Iván Morante, que sueña con esa oportunidad que tienen en mente todos los 'mirlos' que pasan por la 'Fábrica' de Valdebebas, pero para la que está poniendo los cimientos con unas actuaciones de alto nivel en el centro del campo del Castilla.