La FEF rompe amarras con Rubiales y pide una resolución «definitiva lo antes posible»

Rocha, que por la tarde se vio las caras con Víctor Francos, presidente del Consejo Superior de Deportes (CSD), y le puso al corriente de los cambios estructurales prometidos por la FEF durante una cordial reunión que duró alrededor de una hora y cuarto, firmó una declaración institucional en la que solicitó «las más sinceras disculpas» al conjunto del futbol mundial, de sus instituciones, de los y las futbolistas, especialmente las jugadoras de la selección española y de la selección inglesa, de los demás agentes implicados en el deporte rey y a los aficionados de todo el mundo por el «comportamiento totalmente inaceptable» de Rubiales, que, incidió, «no responden en absoluto a los valores del conjunto de la sociedad española, de sus instituciones, de sus representantes, de sus deportistas y de los dirigentes del deporte español».

Rocha destacó que «la sociedad española es un ejemplo de tolerancia y de civismo, así como «un ejemplo de comportamiento y de decoro deportivo». Sin embargo, lamentó el también presidente de la territorial extremeña, «esa nobleza y prestigio internacional» de la sociedad y del deporte español «se han visto empañados» por la actuación de Rubiales.

«El daño causado al fútbol español, al deporte español, a la sociedad española y al conjunto de los valores del futbol y del deporte ha sido enorme», prosiguió Rocha, razón por la cual la FEF transmitió «al conjunto de la sociedad y al conjunto del fútbol mundial su máximo pesar por lo sucedido». «Nos sentimos profundamente apenados por el daño causado y por ello, desde esta RFEF debemos pedir las más sinceras disculpas y adquirir un compromiso firme y absoluto de que hechos como estos no puedan volver a suceder nunca más», abundó.

Rocha recordó que «tanto los organismos rectores del mundo del fútbol -FIFA-, como los organismos responsables del deporte a nivel estatal -Consejo Superior de Deportes (CSD) y Tribunal Administrativo del Deporte (TAD)- han adoptado de manera inmediata las medidas correspondientes, de apertura inmediata de sendos expedientes disciplinarios en contra de D. Luis Rubiales y que llevan aparejada, en el caso de la decisión de la FIFA, la suspensión inmediata de sus funciones como presidente de la RFEF». La Federación, remarcó, está facilitando todo el soporte documental y administrativo que se requiere desde ambos órganos disciplinarios «para poder disponer de una resolución de manera definitiva lo antes posible que permita resarcir el daño causado».

«Ganar la Copa del Mundo fue uno de los momentos de mayor orgullo en la historia de la Federación Española y uno de los momentos más importantes del deporte español, del futbol femenino», incidió Rocha, que subraya que los gestos de Rubiales «no son aceptables bajo ningún concepto» y que por ello la FEF «retiró inmediatamente de su web todos aquellos comunicados inapropiados y carentes de sentido que no ponían en valor lo logrado por la selección y no tenían en cuenta las afirmaciones de la jugadora» sobre los hechos acaecidos.

«La actuación del Sr. Rubiales no representa los valores que defiende la Federación Española, ni los valores del conjunto de la sociedad española y su actuación debe achacarse única y exclusivamente a él, puesto que es el único responsable de sus actuaciones ante la sociedad, ante los órganos deportivos y, si es el caso, ante la justicia», atajó el mandamás interino de un ente cuyos miembros se sienten «apenados y avergonzados por el dolor y la angustia adicionales que esto ha causado».

«Lamentamos que este incidente haya impactado negativamente lo que debería haber sido una celebración continua del fútbol, tanto de nuestra selección nacional como de las 'Lionesses' de Inglaterra, que fueron un rival verdaderamente extraordinario en una emocionante final», expresó Rocha, que apeló al comunicado del pasado 28 de agosto en el que los presidentes de las federaciones territoriales «exigían unánimemente» la dimisión de Rubiales como presidente de la FEF «por su conducta impropia».

«También se anunció una revisión de las actuales estructuras directivas de la organización, que sigue en marcha», agregó Rocha, quien detalló que «para proteger el fútbol español y garantizar que estos comportamientos no se repitan, se puso en marcha inmediatamente una investigación exhaustiva de los hechos y de las medidas subsiguientes» adoptadas por Rubiales y que los presidentes de las territoriales «se han comprometido en llevar a cabo una profunda revisión de todas las políticas y procedimientos de la organización». «El compromiso de todos ellos es unánime y firme para disponer en los próximos días de todo un conjunto de actuaciones que mejoren la gobernanza de la federación española de fútbol y permita reparar, en la medida de lo posible, el daño causado», aseguró, antes de incidir en que la FEF «debe actuar de manera coordinada con el Consejo Superior de Deportes para servir a los intereses generales del deporte español».