La Federación, con Éder Mallo: «Tuvo que hacer noche en otra ciudad por motivos de seguridad»

El Comité Técnico de Árbitros (CTA) y la Real Federación Española de Fútbol (RFEF) han salido al paso de las graves acusaciones vertidas por el Nástic de Tarragona contra el árbitro leonés Éder Mallo González, en la que le señalaban por haber «amañado» el partido del playoff de ascenso ante el Málaga del pasado mes de junio y de haber «alterado» el acta arbitral.

El CTA ha mostrado su apoyo «incondicional» al equipo arbitral de aquel partido, encabezado por el leonés, y su «solidaridad» ante la situación que está viviendo. Es más, los árbitros han constatado que la actuación de Mallo González en el ese partido y las decisiones adoptadas fueron «correctas, completando una actuación óptima».

Este comité también ratifica «todos los puntos» señalados en el acta oficial que redactó el árbitro leonés tras acabar el partido, incluido el ambiente de crispación y violencia vivido tras el pitido final. De hecho, el CTA explica que la atmósfera era tan «violenta» que se vieron en la obligación de «trasladar al equipo arbitrar a otra ciudad para pasar la noche con el fin de garantizar su seguridad».

Por todo ello, el CTA y la RFEF lamentan la actuación del Nástic y la «invasión de la privacidad» del equipo arbitral, tratando de «condicionar» su labor, además de garantizar la «integridad» de la competición. Por ello, piden al club catalán recapacitar y ser conscientes de la «gravedad de estas acusaciones».

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