«Es un partido para entrar en la historia»

«Este es un partido para entrar en la historia y poder dar una alegría a los portugueses. Van a jugarlo 11 millones de portugueses y habrá 11 jugadores, probablemente 14 más, con una voluntad tremenda para poder hacer historia», dijo el central, de 33 años, en la conferencia de prensa oficial que ofreció en el escenario del partido.

«Vamos a luchar por la victoria también por los emigrantes. Aquí sentimos su calor en la concentración de Marcoussis. Hasta cuando volvimos a las tres, las cuatro o las cinco de la madrugada, después de jugar partidos, nos estaban esperando para animarnos. Tenemos la máxima oportunidad de retribuir todo ese cariño y honrar a nuestro país», subrayó.

Aseguró que podrá jugar y, humilde, rechazó que sea un líder en el campo, tal y como le ha catalogado su entrenador, Fernando Santos. «El líder está aquí a mi lado y es el entrenador. Nosotros sólo tenemos que hacer lo que nos dice dentro del campo. Yo me limito a tratar de ayudar lo mejor que puedo. No sólo yo tengo experiencia, todos la tenemos y tratamos de hacer lo que nos dice», explicó. A juicio del contundente zaguero merengue, su seleccionador es «extremadamente inteligente».

Pepe se detuvo en analizar por qué se mantiene en plena forma, pese al discurrir de los años. «En el Real Madrid siempre he tenido mucha exigencia y llevo en la selección desde finales de 2007. Son ya tres Eurocopas y dos Mundiales. Siempre me cuido y preparo para estar al más alto nivel», garantizó.

Elogió al francés Antoine Griezmann, a quien bien conoce de los derbis madrileños. Le llama la atención, sobre todo, su facilidad para cabecear. «Tiene una gran calidad. Pese a no ser muy alto, mide muy bien el 'tempo' a la hora de rematar. Ha evolucionado mucho en el Atlético y es un jugador muy importante, pero nosotros tenemos que centrarnos en el colectivo. Francia tiene grandes jugadores que juegan en grandísimos equipos y espero una bellísima final, que espero que ganemos», consideró.

No cree Pepe que en juego esté una pugna entre el colchonero y Cristiano Ronaldo por el Balón de Oro. «Mañana (domingo) no está en juego eso. Pero Cristiano ya ha demostrado todo lo que es capaz de hacer y espero que lo haga para ayudarnos a ganar en la final», dijo Pepe, quien se considera un «privilegiado por poder entrenar con un ser humano como él, un ejemplo para todos».

Pepe confía en que este domingo se repita la sorpresa de 2004, cuando Portugal era la gran favorita en la final de Lisboa, pero se impuso Grecia: «Sería fantástico. Eso pasó hace mucho tiempo y es un partido completamente distinto. Lo más importante es estar bien y lograr el título».

Pasó de puntillas por la designación del colegiado inglés Mark Clattenburg, el mismo que dirigió la última final de la Champions entre el Madrid y el Atlético, que concedió el gol de Sergio Ramos en fuera de juego y que le hizo un gesto al defensa luso para que dejase de teatralizar. «No es normal que dirija las dos finales, pero por algo le habrán designado. Espero que todos tengamos una noche feliz», concluyó.